Peachy smell ✧ KookTae

OO7

— ¡Jung HoSeok! — TaeHyung entró a su departamento cerrando con un fuerte portazo detrás de él, caminando a pisotadas hasta el cuarto de su amigo.

— También me fue bien, gracias — Dijo con sarcasmo mientras continuaba leyendo su libro.

— ¡¿Por qué le dijiste a JungKook de los girasoles?! — Reprochó mostrándole el ramo de las flores, manteniendo su ceño firmemente fruncido.

— ¿No te gustaron? — Cuestionó el castaño hacia su amigo mirándolo extrañado, pero una sonrisa creció en su rostro cuando comprendió de qué iba aquella situación — Acaso... —

— ¿Qué? — Respondió el omega pelirrojo ferozmente.

— Estás así porque te sientes avergonzado de que JungKook, el alfa que es demasiado tu tipo, te haya dado tus flores favoritas y además quiera conquistarte.

— No es verdad — Un rubor se extendió en las mejillas de TaeHyung, sintiéndose cohibido bajo la mirada socarrona de HoSeok.

— Tengo razón — Afirmó el castaño riendo.

— ¡Incluso usó neutralizador para su aroma, Hobi! — Dijo TaeHyung sintiéndose mal por hacer pasar por eso al alfa, rindiéndose y dándole la razón a su amigo omega, mientras se dirigía a la cama de este y se tumbaba sobre su espalda.

HoSeok soltó una risita — ¡Es porque te quiere!

— Me siento mal por hacerlo pasar esa situación — TaeHyung observó con un puchero el ramo de brillantes girasoles.

— No te sientas mal, TaeHyung — HoSeok se acostó junto a él — Si continúas con tus terapias, verás que las cosas se resolverán.

— Eso espero, incluso si JungKook no es mi alfa, realmente quiero tener una oportunidad con él — Confesó el omega pelirrojo con un sonrojo en sus mejillas.

— ¿Y si es tu alfa? — El castaño se sentó de golpe abriendo exageradamente sus ojos.

— No lo había pensado — TaeHyung se sentó mirándolo con el ceño fruncido.

— ¡Por eso debes de superar tu problema, bribón! — HoSeok palmeó los muslos contrarios para después apuntarlo con su dedo — Debes de hacerlo.

— Supongamos que es mi... — TaeHyung sonrió con vergüenza — Mi alfa.

HoSeok soltó un grito emocionado al ver a su amigo soltando sonrojos por doquier.

— ¿Crees que él sepa que soy su omega? — Cuestionó con un brillo de anhelo en sus ojitos.

HoSeok se llevó su mano a la barbilla pensando en aquello que le acababa de preguntar su amigo.

— No lo sé, TaeHyung — Dijo finalmente con una mueca de incertidumbre, ganándose una mirada triste.

— Probablemente no seamos destinados — El omega pelirrojo volvió a acostarse en la cama boca arriba, manteniendo sus girasoles abrazados contra su pecho.

— Aún tengo curiosidad sobre algo — Confesó el castaño con un toque de vergüenza.

— ¿Qué es? — TaeHyung lo miró en señal de que estaba poniendo atención a lo que le preguntará.

— ¿Por qué JungKook se fue tan apresuradamente? — TaeHyung se incorporó, ladeando su cabeza al no comprender.

— ¿Cuándo? — Preguntó TaeHyung y aplaudió cuando lo recordó — ¿Hablas del día en que nos conocimos?

HoSeok asintió frenéticamente — Ese mismo día.

— Realmente no lo sé, parecía un poco enfermo.

— JungKook faltó un día a la escuela, pero antes no se había mostrado enfermo — HoSeok frunció su ceño.

— Quizá fue una emergencia — TaeHyung se encogió de hombros.

— O quizá entró en celo — Respondió con obviedad HoSeok.

— Bueno, puede ser una opción — El omega pelirrojo le dio la razón.

— Pero creo que no era su fecha de celo — Compartió HoSeok recordando que no hace mucho antes de eso el alfa se había ausentado.

— ¿Y tú cómo sabes eso, Jung HoSeok? — Preguntó TaeHyung a la defensiva.

El castaño rodó los ojos — ¿Te recuerdo que somos compañeros? Y tú también conoces en qué momentos se ausentan tus compañeros, TaeHyung.

El pelirrojo soltó un quejido al sentir los dedos de HoSeok impactarse sin tanta fuerza en su frente descubierta a modo de regaño.

— Y el que haya entrado en celo cuando no debería ¿Qué tiene que ver conmigo? — Cuestionó con una ceja alzada.

— Mi abuela dice que, algunas veces, el instinto animal es más poderoso y reclama a la pareja predestinada.

— ¿A qué te refieres? — El pelirrojo lo miró nuevamente con un brillo en sus ojos.

— A que tu alfa probablemente entró en celo de manera repentina, porque la madre luna los formó a ustedes dos como pareja — HoSeok se levantó de su lugar, comenzando a caminar en la habitación — Pero tú no entraste en celo para reclamarlo como tu alfa porque...

— ¿Por qué? — TaeHyung lo miró nervioso.

— ¡Porque tienes tu nariz lastimada! — HoSeok se volteó hacia él señalándolo con su dedo mientras una sonrisa crecía en su cara.

TaeHyung sonrió grande, pero se congeló y desvaneció su sonrisa — No lo creo, Hobi.

— ¿Por qué no? — Preguntó HoSeok acercándose a él y apretando sus mejillas ligeramente.

— De seguro hay omegas mejores que yo — TaeHyung lo miró con ojos cristalinos — Vomité apenas lo conocí.

— Y por eso está utilizando su neutralizador, cariño — HoSeok envolvió al omega entre sus brazos, dejándolo llorar por largos minutos.

TaeHyung se separó de él para caminar hacia el baño y poder limpiar su nariz con más cuidado del que tomaría hacerlo.

Desde ahí escuchó que su celular sonaba, indicando la llegada de un nuevo mensaje.

— ¿Puedes contestar? — Le preguntó a HoSeok mientras se dirigía por las vendas para su nariz.

HoSeok hizo un sonido de afirmación y una sonrisa se instaló en su rostro al ver quién había mandado el mensaje.

Tomó una respiración y se acomodó en su cama, comenzando a escribir una respuesta al mensaje y continuando con la conversación hasta que TaeHyung salió del baño.

— ¿Quién era? — Preguntó viendo a su amigo muy animado y con una sonrisa de autosuficiencia.

— Domingo, tu cafetería favorita.

TaeHyung colocó una de sus manos en su cintura, mirándolo sin entender.

— ¿Me llevarás a comer?

HoSeok negó con su dedo — Tienes una cita, con JungKook.

TaeHyung abrió sus ojos y corrió hasta HoSeok quitándole su teléfono para leer los mensajes. Se sonrojó de golpe al ver que, en efecto, el domingo tenía una cita con quién probablemente era su alfa.