Giosuè
Estoy en mi habitación viendo la televisión, pensando si acompañar a mi hermana y a sus amigas a la plaza cuando escucho como un vidrio se rompe, y la voz de una mujer desconocida gritando ¡cuidado!, salgo de mi habitación para averiguar qué está pasando, llego a la mitad de la escalera cuando encuentro a mi hermana.
− Azzurra ¿qué está pasando? – me jala del brazo para terminar de subir la escalera.
Me conduce hasta su cuarto, me suelta mientras comienza a buscar algo, no entiendo que está pasando, ella se percata por lo que decide responder a la pregunta que le había hecho.
− Parece que nuestro padre trabajaba para la mafia de los Rossi, hay una mujer abajo con nuestra madre que dice ser caporegime de Lady Rossi.
Saca su maleta y empieza a guardar los más importante dentro de ella.
Me rio, no hay forma de que lo que dice sea cierto. − ¿Qué fumaste?
− No estoy drogada, Giosuè, ese ruido fue una bala disparada a través de la ventana de la cortina que buscaba matar a mamá.
− Se te zafaron los tornillos. – aseguro mientras casi termina de preparar su maleta.
− Tu hermana está totalmente cuerda, aunque hubiera preferido que no se enteraran así, prepara tu maleta Giosuè, hija cuando termines con la tuya prepara la mía, por favor, tengo que tomar algunas cosas de la oficina de tu padre.
Escuchar esas palabras de mi madre me confunde, aunque no puedo culparla por habernos ocultado la verdad, aunque quisiera descubrir la razón
Mi hermana asiente. – Mamá, ¿cómo murió realmente nuestro padre?
Ella mira a la mujer desconocida que asiente – yo le respondo dese prisa.
Mi madre sale del cuarto rumbo a la oficina de nuestro padre, yo estaba por ir a mi habitación a preparar mi maleta, pero me detengo en la puerta de la habitación para escuchar mientras ella parece buscar sus documentos para meterlos en la maleta.
− Cuando su padre murió Lady Nicoletta llevaba a cabo una venganza contra los Marchetti por las muertes de su familia, su padre como consigliere se vio implicado, la prometida del mejor amigo del heredero Marchetti se volvió loca cuando supo que habíamos matado a su prometido, de alguna manera quiso vengarse matando a las herederas de los Rossi y los Bianco, se armó un tiroteo en el que su padre acabo con varias vidas, pero igual él murió.
No puedo creer que mi padre haya muerto de esa forma, aunque por lo que recuerdo de él sé que no es algo extraño que se arriesgará así, él era muy valiente, me alegra saber por fin la verdad.
Corro a mi habitación y me pongo a preparar mi maleta, meto lo más importante en ella junto con mis documentos, la cierro, salgo de mi habitación comienzo a caminar por el pasillo y veo a mi hermana saliendo de la habitación de nuestra madre con su maleta, bajamos juntos y nos apresuramos a donde está la mujer, mi mamá baja tan solo un minuto después.
− Hija conducirás el carro, Gianna ira de copiloto y te dará las instrucciones. – nos da un arma a mi hermana y una a mí − espero que no tengan que usarlas, ¿recuerdan cómo se usan? – mi padre nos enseñó a disparar cuando éramos pequeños, recuerdo perfectamente como se usa.
− No estoy segura. – dice mi hermana
Se escucha una bala que le da a la puerta.
− ¡Hay que irnos ya! – dice Gianna.
Mi mamá quita la alfombra del salón y abre una escotilla en el piso, bajamos las escaleras que hay ahí y terminamos en un lugar pasillo con luces en el piso, cierra detrás de ella y empieza a andar conduciéndonos a la casa de mis abuelos, el pasadizo está en subida y termina en una puerta que al abrirla resulta que da a la bodega que está debajo de las escaleras, Azzurra abre la puerta de bodega y salimos a la casa.
Se apresura al garaje, mete su maleta en la cajuela y prende elautomóvil, mi mamá y yo subimos nuestras maletas con ayuda de Gianna y luegolos tres subimos al vehículo, Azzurra abre la puerta del garaje con un botóndel automóvil y conduce fuera cerrando el garaje detrás de nosotros, Gianna leda las instrucciones mientras maneja hasta la mansión de los Rossi lo cual lelleva una hora.
Lía
Al día siguiente nos levantamos temprano, nos cambiamos y desayunamos, Adrián nos está esperando en el lobby para partir en mi coche al hospital, cuando llegamos nos dicen que mi prima ya despertó, pero que me tía Nicoletta está con ella en este momento, nos sentamos a esperar hasta que mi tía sale.
− Tía, ¿Rosella está bien? ¿Puedo verla?
− Se está recuperando y si puedes entrar a verla.
Abro la puerta de la habitación y entro como un torbellino por ella, de alguna forma estoy llorando, hacía mucho que no lloraba frente a nadie.
− Por favor perdóname, debí ir contigo.
− Tranquila, estoy bien.
− ¡Estás en un hospital! Y es mi culpa.
− No, no lo es, yo debí cancelar el tour cuando me dijiste que no podías, sabía que era peligroso ir sin ti y aun así lo hice.
− No debí haberte cancelado, pero...
Agacho la cabeza, no sé cómo decirle, además de que no lo considero una justificación.
− ¿Qué pasa Lía?
− Yo... estoy... − respiro profundamente − estoy embarazada.
− ¡Espera ¿qué?!
− Llevaba dos semanas de retraso así que me hice una prueba antier y salió positiva, ayer vine aquí a hacerme el examen de sangre, quería asegurarme, me dieron los resultados poco antes de que te dispararán.
− ¿Sabes quién es el padre?
− Creo que sí.
− ¿Qué harás?
− Aun no lo se.
Estoy asustada por primera vez desde hace 2 años después de que jure que no volvería a amar a nadie, por lo que paso tras el incidente, realmente vuelvo a estar asustada.
− Cuenta conmigo, decidas lo que decidas.
− Gracias. – la abrazo. – Por cierto, Christine y Killian ayer decidieron cubrirme con nuestros padres y decir que estaba con ustedes, aunque ellos no saben que estaba aquí.
− Seguiré la historia, prometimos apoyarnos siempre, ¿no?
− ¡Te quiero!
− ¡Y yo a ti!
− Supongo que querrás hablar con Christine y Killian – asiente. – entonces les diré que ya pueden entrar.
− Gracias.
− Ah lo olvidaba, Adrián también está aquí.
− ¿Adrián?
− Casi golpea a Killian por permitir que te dispararán hasta que se dio cuenta de que estaba destrozado, no dejaba de gritar, parece que si te tiene demasiado cariño.
Niega con la cabeza mientras salgo de la habitación, me mantengo igual de segura que siempre, con la cabeza en alto, no dejaré que nadie que no sea Rosella me vea en mi versión más vulnerable.
En cuanto salgo hago una seña a Christine, Killian y Adrián para queentren, luego salgo del hospital, le aviso a mi tía que regresaré a mi mansiónen mi coche a lo que asiente, salgo del hospital y subo a mi coche, conduzco ala mansión sin percances, en cuanto llego mi padre y Saoirse me hacen preguntasde lo sucedido y sobre el estado de mi prima, respondo a todas sus preguntashasta que me dejan subir a descansar.
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Lady Mafiosa Americana
Novela JuvenilTercera parte de Lady Mafiosa, sigue la historia de Lía Bianco Rossi mientras estudia la Universidad en Harvard