Había caído la noche y la fogata había logrado ser lo suficientemente alta para que el humo negro se viera a la distancia pero no tanto como para convertirse en un fuego salvaje.
Max había improvisado con varias ramas un soporte para poder mantener su pierna elevada mientras Nat gritaba ya sea porque todo le da asco, miedo o ansiedad.
El pobre la estaba pasando mal aunque no puede negar que ver al menor intentando poner trampas nada útiles para pumas era diversión total.
Se encontraban descansando, no era tan tarde en la noche pero estaban seguros que la búsqueda había parado por ese día al menos, nadie era tan tonto para buscarlos en la noche.
Max estaba contemplando el fuego mientras el menor intentó terminar de ubicar su tienda de campaña y limpiarse un poco en la privacidad de un árbol.
A decir verdad no parecía que estuvieran perdidos, tenían demasiadas comodidades y estaban en una zona relativamente segura de no ser por el calor y la falta de proteína.
Eso si fue bastante irresponsable despreocuparse tanto del riesgo real que puede ser tener una lesión en la mitad de la nada.
Lo que no fue nada irresponsable fue el poder arreglar un poco su relación con Nat, que a decir verdad el deseaba que su relación con el menor mejorará.
Ya se había resignado a que Nat era su crush si ya había pasado del estado de negación a aceptación de su gusto por el menor después de casi 3 días en medio de la nada que terminó de gozar aquellas cosas que lo enamoraban de él.
Y aunque su corazón lo engañara, haciéndole creer que el menor sentía algo también o comenzaba a sentirlo su cerebro le recordaba la realidad, al menor no le interesaba de ninguna manera su presencia y menos cuando Nat tenía a Mark pero a veces le gustaba pensar que en medio de la nada cualquier cosa podía pasar.
A veces se veía tentado a besarlo, más aún cuando el menor le preguntó si podían ser amigos, quería gritarle que no, quería ser todo y hacer todo con el, cosas que con amigos no haces, pero claramente no era un animal, debía aceptar al menos esa amistad que le ofrecían.
También por eso no dudo en pedirle que le modelara su ropa interior, desde el momento en que la vio en su maleta quiso verla puesta en el menor, ver como se ponía en cuatro para dejar ver su intimidad únicamente cubierta por esa trozo de tela y devorarlo por completo.
Era un pervertido, no iba a negarlo, pero el pequeño Nat despertaba en el todas las cosas que estaban mal en el, como meterse en la relación de una pareja, fantasear con un compañero de trabajo, todo estaba encaminado a lo peor.
Pero el estaba dispuesto a que todo se fuera a la mierda y hacer una cosa mal una vez más antes de que fueran rescatados, seguramente no les tomaría más allá de mañana, su tiempo era limitado y debía aprovecharlo.
Su hilo de pensamiento se vio interrumpido cuando el menor regreso con algo de agua y una media limpia de su maleta, se agachó frente a el y comenzó a mojar la prenda antes de ponerla en su tobillo haciéndolo sisear.
- Quédate quieto, el agua está algo fría y puede ayudar con la hinchazón. - Dijo golpeándolo suavemente evitando que se moviera de forma agresiva.
La luz de la fogata iluminaba en un tono cálido y íntimo sus hermosos ojos marrón que si se acercaba lo suficiente se pondrían color miel. El lipstick de sus labios también era un plus a esa imagen tan hermosa que tenía delante.
Parecía parte de la naturaleza, como si perteneciera y simplemente estuviera ahí para salvarlo con una diversión natural de su edad, la inocencia en un cuerpo de pecado.
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Stay like a Local! - MaxNat
FanfictionNat es un reportero con una carrera frustrada quién es enviado a una provincia en medio de la nada con su peor enemigo, el fotógrafo Max a realizar un reportaje que podría ser la oportunidad de su vida. Ambos tendrán que completar el trabajo. No sin...