II

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20 de Agosto del 2014

Mi vida era tan aburrida como para un adolescente de 18 años, no había nada de interesante en ella solo tenía la misma rutina diaria y aburrida que consistía en levantarme, comer, ir a estudiar y regresar a hacer los trabajos que me dejaban en la preparatoria.
Mi vida desde que me volví en adolescente jamás fue interesante hasta una noche de invierno.

- Tobio vamos anímate a ir, hoy tocará Ooruk Awakio quiero ir verlos - Kenma me agarraba del brazo mientras tenía dos entradas en sus manos - no me rechazaras hoy verdad?

- Ooruk Awakio? No es esa banda que toca rock, punk? - me detuve para mirar a Kenma

- Si! Vamos Tobio, no tengo con quien ir y quiero verlos se presentarán hoy - Kenma empezó a hacer uno de sus tantos pucheros, era imposible decirle que no.

- Esta bien, pero solo por acompañarte - caminamos unos pasos más y mi chofer estaba esperándonos.

Kenma y yo éramos muy buenos amigos, él era muy lindo e inteligente, era algo tímido pero era social, destacaba entre muchos ya que sus cabellos rubios le hacia resaltar y combinaba perfectamente con sus ojos, teníamos casi los mismos gustos, tenía la personalidad de un gato; podría describir que lo único interesante de mi vida era Kenma, lo quería pero no de una forma romántica.

- Crees que Kuroo quiera firmarme un autógrafo? Yo soy su fan número 1, tú crees Tobio? - me miro con un brillo en sus ojos - en todas sus presentaciones le suelo regalar todo tipo de cosas o se acordará de mi?

- Lo más probable es que si, si eres un fan loquito por el, debe de acordarse bien de ti - Kenma me miro amenazante, es que era la verdad.

- No me ayudas mucho Tobio, pero bueno nos vemos a las 6 en mi casa - el auto había parado y él se había bajado.

- Kenma yo vendré a recogerte - alce la mano despidiéndome de él.

- Esta bien Tobio, nos vemos en la tarde - alzo su mano despidiéndose de mi.

La puerta se cerró automáticamente, ya habían pasado 20 minutos y habíamos llegado a casa, mi chofer entró a la mansión y estacionó el auto.
Me baje del auto mientras el chofer se estacionaba dentro del garaje, cuando entre me recibió la sirvienta y junto con ella mi hermana.

- Hermanito recién llegas, bueno me despido de ti tengo que irme, no me esperes en la noche, no regresaré hoy.

- Miwa, antes que te vayas, mis padres te avisaron cuando regresaran?

- Jmmm solo se que dentro de un tiempo, tú sabes que ellos solo vienen un mes y se van.

- Comprendo, bueno adiós - me despedí de miwa y me dirigí a mi habitación.

Me tiré a mi enorme cama, no se si era bueno o no que mis padres no estuvieran conmigo, podía hacer lo que quería ya que Miwa tampoco paraba aquí pero no tenía con quien divertirme, solo con Kenma que venía a jugar videojuegos y tomar uno que otro trago; tal vez mi vida sería mejor si no fuera tan introvertido y me soltaría un poco más con la gente.

Saque una caja de cigarros de mis cajones y junto con él un encendedor, había agarrado la costumbre de fumar, no le veía lo malo, amaba el aroma y podía sentirme bien, todo estrés o problema se iba con un cigarro. Me mantuve encerrado en mi habitación hasta que llego Mika, mi sirvienta a entregarme el almuerzo; notó el olor a cigarro pero se hacía la de la vista gorda, sabia que si a mis padres les contaba la despedirían ya que a mis padres no les importaba y solo la acusarían de metiche.

Coloque la comida en mi mesa y saque otro cigarrillo, me tire de nuevo a mi cama mientras mi mirada se fijaba en un punto del techo. La llamada de Kenma me saco de mis pensamientos, no se cuanto tiempo estuve así,

Necesito de tu amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora