𝐂𝖺𝗉𝗂𝗍𝗎𝗅𝗈 𝟣𝟢 ;

198 12 4
                                    

𝐌𝐈𝐀

Habían pasado algunos días desde que Mateo me dijo que me amaba, a decir verdad, estábamos mejor que nunca, nunca antes había estado así con él, y eso me encantaba.

Era extraño, ni yo misma sabía qué éramos, no éramos amigos, pero tampoco novios, era extraño, mucho, pero lo soporté, de todas formas, era lo que siempre había soñado, supongo que era momento de disfrutarlo.

En este momento me encontraba con él, con aquel morocho apoyando su cabeza en mi pecho mientras yo le acariciaba los rizos que tanto me gustaban. Estábamos viendo Star Wars, que a decir verdad, no me gustaba, pero la veía por él.


— Eu, Mía. — escuché la voz del morocho, que interrumpió mis pensamientos.

— ¿Qué pasó? — dije respondiéndole mientras le miraba a sus ojos color café.

— Vos, ¿qué sentís por mí?

Fue una pregunta que me costó responder, ni en matemática me tardo tanto en responder como me tardé en hacerlo.

— Es difícil, es como si sintiera que una parte de mi no está cuando vos faltas, es como si sin vos no fuese yo misma, es... complicado. Pero supongo que eso es estar enamorada, ¿no?

— ¿Enamorada? Yo no estoy seguro de estar enamorado.

— ¿Qué? Entonces, ¿qué es esto? — dije sabiendo que ni yo misma sabía qué éramos.

— Y no sé, sólo me dejo llevar. — sentí que sus palabras eran como puñales clavándose en mi pecho.

— ¿Qué sentís por mí, Mateo?

— ¿Mateo? Nunca me llamas así.

— No ignores mi pregunta, ¿qué sentís por mí?

— No sé, te quiero, supongo, me gustas, es raro, si admito que me gustas, pero no sé si llego a estar tan enamorado como vos.

Sus palabras me hicieron quedarme completamente impactada, no sabía qué responder, y Mateo al darse cuenta de mi reacción rápidamente me rodeó con sus brazos.

— Perdón, no quería hacerte sentir así. — hizo una pausa y dejó un beso en mi frente. — Te quiero como no podés imaginarte.

Sólo dame una oportunidad y tal vez mañana no estés más solo. — dije mirándole a los ojos, manteniendo contacto visual con él, cosa que nunca antes había hecho.

Pude ver que una sonrisa se formaba en su rostro, lo que provocó que yo también sonriera.

— ¿Puedo hacerte otra pregunta?

— Ya la hiciste. — dije riendo un poco mientras mantenía un tono bromista.

— Dale, Mía, lo digo en serio.

— Sí, dale, decime. — dije algo preocupada por su tono serio.

— Mía Elizabeth, ¿puedo ser tu novio?

Realmente esperaba cualquier cosa menos esa pregunta, mi niña interior era incapaz de responder que no, supongo que mi respuesta era muy clara.

— ¿De verdad lo preguntas? Creo que es obvio que sí.

Ni un segundo había pasado y Mateo me besó, no era la primera vez que nos besábamos, ya dije que últimamente habíamos estado muy pegados, por muchos otros besos que nos dimos, este fue el más real, por fin sentía que éramos él y yo, nadie más.

— Mateo, te amo. — dije sobre el beso sin separar mis labios de los suyos.



*ੈ✩‧₊˚༺☆༻*ੈ✩‧₊˚




HOLAHOLA, pido perdón por la demora

ando medio bloqueada, asique si me dan ideas los amaria mucho

YA LLEGAMOS A 1K DE VISTAS, los amo una banda

ya tengo pensado el final, pero siento que faltan muchas cosas en medio

prometo que voy a retomar el coso de escribir, lo intentare

procedo a irme a dormir porque me dieron las 3 de la mañana


¡Gracias por leer, no olvides votar!

𝐃𝐄𝐒𝐄𝐎 𝐏𝐄𝐑𝐃𝐄𝐑 ; 𝖳𝗋𝗎𝖾𝗇𝗈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora