|CAPÍTULO 17|

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Mi mente estaba saturada con información de Marena, tanto que podría hacerme pasar por ella. Estaba decidido a ser su dama de honor, sin importar nada.

Marena se encontraba buscando su vestido para la boda en una tienda de la ciudad, así que iba a ayudarla —sin que ella me lo pidiera- Me puse mi mejor ropa, conduje por la ciudad hasta la tienda y bajé, dispuesto a salir siendo su dama de honor.

Entre a la tienda, estaba un poco nervioso, sin embargo sabía que Mare no iba a pedirme que me fuera.

Ella es de las mejores personas que he conocido. Estaba sentada, mirando sus pies, mientras su madre veía vestidos.

-Mare - Me miró, y sonrió haciendo que sintiera un alivio

-Milo - corrió a abrazarme.

-Lamento todo lo que hice Mare, realmente lo siento, yo..

-¡ESTE ES EL ELE...Milo...

Oh mierda "Elle " solté a Lea

-Milo, Ellie es...

-La nueva dama de honor- me sonrió como si hubiese ganado un trofeo.

-Sé que Marena cometió un error al pedirte que lo fueras, y Dios, me alegro que haya recapacitado, porque obviamente no estas apto para tener una responsabilidad y tomar en serio las cosas

-Oye, lamento lo que sucedió hace años, ambos estábamos...

-Milo- La madre de Lea, Keira, me abrazó. 

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-Mira que grande estas- me miró de arriba abajo 

-Lamento no haberte puesto atención ¿Puedes creer que mi bebe se casa por fin?

-Mamá- susurró mientras se sonrojaba

-Se ha ganado la lotería con alguien como Partridge - Elle me miró mal.

-Sé que si hubiese sido con alguien como Milo, igual fuera algo bueno- Keira siempre había tenido cierto afecto por mí y mi relación con su hija.

Sonreí, cuando iba a decir que si eso fuese así, sería más que afortunado, Marena rió, diciendo que quizás nunca me casara por mi falta de seriedad.

-En realidad, estoy enamorado de una chica- la miré seriamente 

-pero ella parece no notarlo

-Así es mejor, Manheim- dijo Elle 

-Vamos, Mare, tienes que probarte esto- la jaló del brazo.

Asentí, ya que ella no había quitado su mirada de encima

-te esperaré aquí- Después de 5 vestidos, no estaba convencida de ninguno.

-Bien, ya que hay un hombre aquí- Keira comenzó 

-Vamos a dejar que Manheim decida el vestido- Negué riendo.

-Vamos, Milo, escoge el vestido que te gustaría que llevara tu futura esposa- Mare se sentó, cansada de todo el desfile

-Vale, solo por ti, linda- le guiñe el ojo y me paré, buscando en todo el lugar por uno, hasta que lo encontré. Era muy simple y elegante a la vez, justo como era Mare.

-Es hermoso- susurró Keira.

-Gracias por eso, Milo- me abrazó para luego salir a cambiarse de vestido.

-Iré a afuera- Anunció Elle.

Keira se sentó a lado mío, tomó mi mano y sonrió

-Nunca se lo dijiste- La miré extrañado 

-Que te gustaba, nunca se lo dijiste

-No me había dado cuenta, hasta que me hizo falta- Asintió

-¿Y por qué no se lo dices?-Negue

-No necesita saberlo, ya se casará, además no es más que mi mejor amiga, solo siento esto porque creo que la perderé- Asintió

-A veces, no podemos ocultar las cosas por mucho tiempo- suspiró 

-El padre de Mare siempre pensó que tú y ella quedarían juntos. Yo lo sigo creyendo

-Pero Louis...

-Él es un buen partido, sin duda, pero no es lo que ella necesita ¿Qué mejor pareja que tu mejor amigo?

-¿Y bien?- ambos la miramos. Decir que Mare se veía perfecta era poco, el vestido resaltaba su belleza, pero sin hacerla lucir provocativa, era sencillo y perfecto para ella. Me paré para tomar su mano y darle una vuelta

-Te ves hermosa- susurré.

-Ha sido gracias a ti, Milo- beso mi mejilla 

-No sé qué haré sin ti

-Espera ¿qué?

-Cuando me case... me mudaré a Irlanda con Louis- Maldita sea.

Bien, no tengo nada que perder diciéndole que me gusta. Lo haría esta noche. En una cita.

QUIERO ROBARME A LA NOVIA/ MILO MANHEIMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora