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Punto de vista de Wukong: 

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Punto de vista de Wukong: 

Las palabras del chico me sorprendieron. "Eran unos adictos" repetí en mi cabeza un par de veces, estremeciéndome un poco por la palabra. 
Debió ser horrible tener padres así. Me empezaba ahora a sentir algo mal por haberle preguntado algo así.

— Debió ser horrible pasar por eso... pero lo ha afrontado muy bien desde mi punto de vista. Eres un gran hermano—. Dije sonriendo luego de mi comentario intentando no hacerle sentir mal luego de mi pregunta, la cual sentía que podría haberlo dejado incómodo por recordar esos momentos

[ ✿ ]

Terminamos llegando a una cafetería cómoda y tranquila. Era realmente hermosa en mi sincera opinión.

Escuché lo que preguntó el chico respecto a lo que quería pedir. Le di otro vistazo a la carta y respondí.

— Supongo que algo sencillo... una taza de manzanilla y tostadas de jamón y queso—. Dije para seguir viendo la carta por curiosidad aunque ya supiera lo que iba a pedir

Me agradaba venir a este tipo de lugares y comer poco para no sentir el pesar de la comida y disfrutar el ambiente del lugar.

Llamé a una mesera para decirle nuestros pedidos. Hecho esto, se llevó las cartas y se retiró con nuestra orden anotada.

Me quedé mirando un rato a Macaque. Era la primera vez que lo veía en persona y no a la distancia, aparte obviamente de la primera vez que nos vimos.

Sus seis orejas eran adorables, su piel morena junto con su pelo oscuro era representativo de él de alguna forma con sus ojos dorados como si fueran oro.

— ¿Y cómo estás, Moon? ¡Cuéntame algo de ti mientras esperamos!

No quería quedarme en silencio toda nuestra salida, era una de las pocas veces que finalmente nos veíamos en persona, quería intentar hablar de algo y no arruinar la reunión. Olvidando la pregunta de sus padres, claro. Ese fue error mío.

Punto de vista de Macaque: 

Al pedirle a la mesera lo que queríamos me quedé observando mi teléfono, el cual saque y prendí, pero cuando estaba apunto de entrar a una app, Wukong me pregunto como estaba y me pidió que le contará algo sobre mí mientras esperamos, eso hizo sacarme una sonrisa, logrando que apague el teléfono y le tome atención.

— Bueno, digamos que...

Comencé contándoles sobre mis hobbys, que me gusta demasiado el teatro y que tenia un don con las sombras.

Hice una demostración rápida en la mesa y este se quedó procesando lo sucedido, dijo que le parecía muy irreal y fascinante, esos simples halagos hicieron que un rubor se posara en mis mejillas mientras soltaba una risita nerviosa.

Ahora era yo quien preguntaba sobre Wukong y no fue bastante difícil, al contrario, fue fácil ya que Wukong comenzó a hablar sobre él muy fácilmente, y realmente me parecía un niño chiquito.

Como sus experiencias cambiaban, como intentaba darle otro tono a su voz para que concuerde con lo que cuenta. Era maravilloso y gracias a eso también descubrí muchas cosas nuevas sobre Wukong.

No sé en que momento, pero la mesera había vuelto con nuestros pedidos, los cuales aceptamos gustosamente. 

Comenzamos a comer pero me di cuenta que Wukong no paraba de mirar mi pastel, era gracioso y adorable ya que sus pupilas se dilataban y su cola se balanceaba, como un gato. Era adorable.

— ¿Quieres probar?— Pregunté mientras sacaba un trozo del pastel con mi cuchara para luego mirar a Wukong quien asentía vergonzosamente

Eso me hizo soltar una risita para luego llevar la cuchara a su boca con una sonrisa divertida.

— Di: "Ahhhh"— Dije, mientras esperaba que Wukong abriera su boca para darle el bocado de pastel, lo cual hizo pero luego de un tiempo

Le di la cuchara en si boca y cuando Wukong pudo saborear el pastel se puso muy contento, como un niño pequeño.

Pero lo que no sabía es que una niña, fan de Wukong, estaba presente en esta cafetería, justo nos vio en esta posición y tomó una foto.
Ese fue solo el comienzo.

Continuará...

Ruby eyes and six ears [Ojos rubí y seis orejas]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora