ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 19

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—¿A qué te refieres Kami?— pregunto Izuku

—Tienes un futuro por delante y tú y yo, seguiremos juntos?— preguntó de pronto

Izuku suspiro y se acercó colocando su mano en la mejilla de Denki— por supuesto que seguiremos juntos mi vida.

Quizá era una promesa o quizá solo una respuesta dada en el momento pero Denki la aceptó, cuando fuera el tiempo volvería a preguntar.

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—Bien que era eso tan urgente con lo que me arrastraste hasta aquí?— Shinso veía con aburrimiento a Denki, el tiempo había pasado y por alguna razón ni Kiri ni kats habían vuelto a decir o hacer nada.

Denki agradecía eso pues ese mes y medio había pasado lleno de cosas nuevas para él, salidas con Izuku, momentos a solas que atesoraba con cariño, salidas en grupo, los entrenamientos con Uraraka y Shoto y aunque al inicio tuvo miedo y vergüenza al final Izuku también comenzó a entrenarlo aunque la mayoría de esos entrenamientos terminaban en situaciones más interesantes.

—Llegan hoy, compré algo para Izuku y espero que le guste— le dijo Denki felizmente mientras caminaba al lado del malva.

—Solo por qué prometiste ayudarme a escoger el regalo de Neito para la graduación es que vengo contigo — suspiro. Denki comenzó a reírse y negó, sabía que Shinso venía por que eran amigos pero no lo aceptaría así como así.

Llegaron a un local de artículos personalizados qué Denki había encontrado una tarde por casualidad sin saber que después acudiría ahí en búsqueda de algo para Izuku.

Denki le enseñó a Shinso el par de tenis rojos, eran personalizados de ahí la razón por la que tardaron tres semanas en llegar.

De un lado decía el nombre de héroe de Izuku y del otro aquel símbolo con el que sus fans habían decidió identificarlo.

—Vaya, hace mucho que no lo veo con tenis de ese color, me gusta que son más parecidos al estilo que usa ahora y no a los que usaba antes— le comento Shinso realmente le parecía que la relación de Denki e Izuku era una de las cosas más bellas, se veían tan bien juntos y se complementaban tanto.

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—Supongo que está todo listo no?— pregunto Shoto caminando a la par de Izuku que mantenía una gran sonrisa en su rostro mientras jugueteaba con un llavero en sus manos

—Si, está todo listo— le dijo— ¿por cierto este fin de semana nos ayudarán?  Es la mudanza de mi madre.

—Llevarás tus cosas también?— preguntó Shoto e Izuku señaló a su espalda, el bicolor entendió.

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—Kats?— Eijiro entro a la habitación del cenizo que lo miro de mala manera antes de suspirar— lo siento

—Como sea, fue cosa de los dos— le dijo el cenizo —Espero que tengas un buen inicio de héroe— le deseo con verdadera sinceridad.

—Podemos ser amigos nuevamente?— pregunto— me alejare de Denki, entendí que ya no puedo más que verlo de lejos, fui un idiota y supongo que debo vivir con el dolor de haberlo perdido.

Katsuki suspiro y asintió— si, creo que amigos estará bien.

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— estoy cansado— suspiro Denki dejandose caer en el suelo del departamento vacío.

—Terminamos la mudanza al fin— le dijo Izuku a su lado ofreciéndole una botella de agua

—Tu habitación sigue completa — señalo e Izuku asintió

—Terminaré eso mañana, irás aún con tu mamá a buscar tu traje?— pregunto

—Si, nos veremos en la noche?–pregunto con emoción.

Izuku asintió, se deslizó hasta quedar acostado con la cabeza sobre las piernas del rubio, Denki comenzó a jugar los rizos verdes disfrutando el momento de paz.

Se sentía curioso, había un miedo nuevamente en su ser pues la graduación estaba a solo días, y luego todo cambiaría para la clase A.

—Izuku?–susurro mirando al frente.

—Mmm?— tenía los ojos cerrados y disfrutaba de aquel momento, sabía que Denki trabajaba en sus inseguridades así que siempre que preguntaba algo el trataba de explicarle con calma y cariño lo que sea de lo que su novio dudara.

—No se cuanto tiempo deba pasar para asegurar algo, aunque supongo que no hay un límite establecido y que se asume con el paso del tiempo y la intensidad de las cosas, aún así tengo miedo— comenzó a reír mientras su índice delineaba el puente de nariz de Izuku— pero estoy seguro de ello— alzó su rostro mirando a la puerta abierta que dejaba paso al balcón—Te amo.

Izuku abrió de golpe sus ojos encontrándose con dos ambar cristalizados por las lágrimas contenidas, se acomodo de rodillas entre las piernas de Denki buscando en sus ojos duda, tomo la mano del rubio y la llevó a su pecho para que sintiera el latido de su corazón.

—Yo también te amo Denki— susurro cuando se inclinó para besar al rubio.

Lentamente las manos de Denki se movieron hasta enredarse en el cabello de Izuku, sintió los labios del peliverde comenzar a dejar besos en su cuello y sus manos colarse bajo su playera, los suspiros escapaban de sus labios.

Izuku se alejo solo para ofrecer su mano que fue recibida de inmediato y llevar a Denki a la habitación.

A solasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora