Déjame Conocerte [spiderbear]

perdón, pero no

Roier sonrió forzadamente mientras cellbit se arrodillaba ante él - guapito, eu te conheço há muito tempo, você é a pessoa que mais amo - el mayor saco una cajita pequeña de su bolsillo - quiero pasar el resto de minha vida com você, te amo mais que tudo - el menor abrió los ojos con sorpresa e incomodidad mientras que cellbit le enseñaba el anillo más hermoso que sus ojos hayan visto; era plateado con detalles blancos, tenia un hermoso rubí en forma de corazón justo en el centro.

-Guapito, você quer se casar comigo?- dijo cellbit con un tono nervioso y cariñoso -Gatinho...yo...- roier miro a su alrededor, observo a la familia del chico arrodillado frente a el, a todas las personas en el restaurante y a sus padres, obtuvo una sonrisa alentadora de su papá quackity y una mirada de orgullo por parte de su padre luzu.

Dirijo su mirada nuevamente a cellbit -y-yo... cellbit... perdón pe- fue interrumpido por luzu - por qué pides perdón, hijo?, es obvio que vas a decir que si así que por favor apresúrate la cena ya casi va a ser servida - dijo con intención de romper la tentación aún que recibió un golpecito de quackity y una risa nerviosa por parte de cellbit.

El mayor continúo con su propuesta -jajaja...então guapito....Você quer casar comigo? - Roier sintió la precisión de decir que si, pero no podía ser tan cruel con el chico y mucho menos consigo mismo. El sentía un gran cariño hacía cellbit, pero desde hace un tiempo ya solo se sentía un compromiso toda su relación, no se dio cuenta en que momento dejo de sentir amor por el, o al menos amor de esa clase

- cellbit, te quiero mucho... pero no...- dijo con tono triste mientras todos centraban su mi rada en el incleyundo al mayor, roier no pudo con la presión - p-perdón- dijo para después salir corriendo del lugar, dejando a su novio, a su familia y a cualquier persona del restaurante con la mirada congelada por el shock.

Todos sabian que Roier y cellbit eran la pareja perfecta, el mejor dúo, y que un día se casarían, tendrían hijos y envejecerían juntos, como toda una pareja de ensueño.

Roier estaba corriendo sin rumbo, solo quería despejarse, tenía lágrimas en sus ojos, no podía creer lo que acababa de hacer, acababa de terminar una relación con el mejor chico del mundo, una relación de 6 años, había estado con cellbit desde secundaria.

Roier estaba tan metido en sus pensamientos que no se dio cuenta cuando chocó con una chico -auch!, que te pasa pendejo-  dijo mientras se sobaba la cabeza, el contrario se dio la vuelta - che, estás bien? -

Roier levantó la mirada y observo al chico más hermoso del mundo, él era alto, su piel parecía porcelana y tenía los ojos más bonitos, parecían dos amatistas brillantes cubiertas por unas pestañas extremadamente largas.