Déjame Conocerte [spiderbear]

nada importante, verdad?

El mayor estaba rojo como tomate, Spreen se dio cuenta de eso, Roier hablo ― Podemos sentarnos?― El contrario asintió y camino hasta el sofá, hizo una acción con el brazo indicándole a Roier que se sentara, por supuesto él lo hizo, seguido de Spreen con la misma acción

Roier miro al rededor, observo con atención el departamento de Spreen, dirigió su mirada al contrario―En que trabajas para tener un departamento así?― dijo con un tono de duda mientras ladeaba la cabeza, el menor penso en su respuesta un par de minutos, lo cual hizo dudar a Roier ―No eres un lider de la mafia, verdad?― dijo con un tono de miedo por su seguridad, Spreen soltó una gran carcajada gracias a las ocurrencias del mayor ―No Roier, no soy un mafioso, soy dueño de el bufete de abogados más prestigioso de la ciudad― dijo restándole importancia

Roier solto un respiro de alivio al saber que no trabajaba para la mafia, era un abogado

―Por que estabas llorando?― dijo el menor volteando a ver al contrario ―Que?― Roier no entendía nada ―cuando nos conocimos, hace unas horas, por que estabas llorando?― Roier puso los brazos detrás de su cabeza mientras se recargaba en el respaldo del sofá mostrándose despreocupado ― mi novio, bueno, creo que ahora es mi ex, me pidió matrimonio frente a nuestras familias, pero le dije que no y salí corriendo

Spreen lo miro con los ojos como platos ―no es importante― agregó Roier

El menos hablo ― como que nada importante?, literalmente te acaban de pedir matrimonio hace unas horas y ahora estas en el departamento de un completo des conocido, no tienes cerebro o que?― le dijo con un tono de regaño y un seño fruncido en su cara

― Pero al menos se que tu no me vas a hacer nada― dijo con un tono de indignación por lo que le había dicho el contrario. Los dos rieron y Roier volteo a ver a Spreen, el no entendía como el menor podía ser tan perfecto y tampoco como su sonrisa podía ser capaz de hacerle olvidar todos sus problemas

Roier admiraba cada detalle de la mirada de Spreen, sin darse cuenta de que su cara se iba acercando poco a poco a la del menor, Spreen no entendía que pasaba, pero no le desagradaba, poco a poco los centímetros que separaban sus labios disminuía, Roier se acerco mas haciendo que sus labios se juntaran para crear un lento y tierno beso, los dos cerraron los hojos y solo disfrutaron del momento

Roier se alejo un poco de los labios de Spreen para poder respirar, mientras bajaba su cabeza y la recargaba en el hombro de Spreen

Spreen estaba rojo como tomate preguntándose por que el contrario lo había besado ―Roier?...Estas bien?― dijo con un poco de duda, al no obtener respuesta movió un poco al contrario dándose cuenta de que estaba dormido

Ese chico se habia quedado dormido en su pecho después de haberlo besado, Spreen soltó una pequeña risa con un poco de ternura, Roier se veía tan pacifico y tierno, parecía un pequeño ángel caído del cielo

Spreen le dio un pequeño beso en la frente, antes de susurrar ―Buenas noches, Roier.