-Acaban de declararme parte del equipo y ya empiezan a hacerme cargo de sus cosas, que molestia. - Murmuró el hechicero quejándose de la situación
La molestia del peliblanco desaparecería en poco tiempo debido a que alguien había tirado de una de las mangas de su camisa, al voltear a ver a esa dirección se toparía con la pequeña niña pelirrosa que había visto junto a las demás miembros del escuadrón.
-Todo irá bien con ellas, me uní justo antes que tu al escuadrón así que puedo decir que ellas son realmente amables. Te apoyare como tu senpai así que ten la seguridad. - Dijo animadamente la pequeña
-Alguien que si es civilizada y respetuosa, pensé que estaba perdido. - Dijo el albino para después agacharse cómicamente
-Dime pequeñita, ¿Cuantos años tienes? -
-Tengo once años. - Dijo la pequeña niña aun con un tono animado
"Una mocosa de once años va a ser mi senpai, que deprimente, definitivamente me convertiría en objeto de burla en cualquiera de mis anteriores círculos sociales si supieran esto." Pensó el albino pensando en los conocidos que tenía el Satoru original y los conocidos del chico reencarnado
-Ella es tu superior en el séptimo escuadrón, ¡Así que ni se te ocurra desobedecerla! - Dijo la chica peli azul
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N/A: A partir de ahora describiré a Himari como peli azul porque decirle "Peliverde" simplemente no me convence.
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La actitud de la chica había molestado un poco nuevamente a Satoru el cual solo desvió su mirada con un notable desdén en la misma.
-De todas formas, Gojo-kun, bienvenido al séptimo escuadrón de la tropa de elite de Mato. - Dijo la peli plateada con una sonrisa mientras extendía su mano
El hechicero al ver esto simplemente sonreiría con resignación para luego hablar.
-Claro. - Dijo el peliblanco aun con esa sonrisa resignada
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Soy El Hechicero Más Fuerte | Mato Seihei No Slave
حركة (أكشن)En el año 2006 una misión sumamente importante fue encomendada a los hechiceros más fuertes de la actualidad. Satoru Gojo y Suguru Geto. La misión consistía en proteger al recipiente de plasma estelar y escoltarlo a la escuela de hechicería. A pesar...