𝗢𝗢𝟭 • morir.

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Justo en una friolenta noche de luna llena, Roth Jang observó el pequeño y viejo apartamento dónde vivía; las paredes eran de un desgastado color crema y decoradas con algunas flores mal pintadas

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Justo en una friolenta noche de luna llena, Roth Jang observó el pequeño y viejo apartamento dónde vivía; las paredes eran de un desgastado color crema y decoradas con algunas flores mal pintadas. Había un sillón para dos personas de color negro ya algo deteriorado, con una mesita de centro, un librero, una tele, la pequeña cocina que también era comedor; vaya que era un apartamento triste. Y lo que más llamaba la atención, era que por ningún lado se encontraba algún portaretratos o alguna foto.

Roth intentaba no ser una persona emocional que se apegara a recuerdos antiguos, aunque últimamente le era imposible no serlo. Soltó un pesado suspiro mientras se colocaba su característica cazadora negra y cerraba con seguro la puerta, yéndose del edificio en dirección al bosque.

Beacon Hills siempre le había parecido un lugar extraño, pero no tanto como él y su familia. En especial él. Estaba de más decir que incluso todo el pueblo pensaba lo mismo, Roth Jang era por mucho muy extraño... y desgraciado. Sí, sin duda alguna estaba maldito.

Colocándose los audífonos, sonrió al escuchar una alegre canción que lo hacía sentir como cualquier adolescente normal aunque no lo era; porque a pesar de la "oscura" apariencia que tenía, Roth era mucho más sensible que eso.

El atardecer había ocurrido hace apenas una hora o dos, y en unas semanas empezaría su primer día escolar en la preparatoria. Y la situación era la siguiente, Roth Jang se encontraba en su límite.

El querer morir le había ganado al querer vivir.

Conforme se acercaba más y más a su objetivo, sentía el suave y frío viento en su rostro; sonrió levemente mientras su presencia se perdía entre los enormes árboles del oscuro bosque y sus pequeños suspiros eran lo único que él creía se escuchaban en ese momento.

Lo cierto era que, si Roth no hubiera tenido puestos los audífonos, se habría percatado del sonido de pisadas que lo seguían.

Su atención se mantuvo al frente, dónde después de varios minutos de larga caminata se pudo ver un solitario acantilado. Pero incluso en ese momento, dónde estaba cada vez más cerca del final que él había elegido, Roth se sentía pleno.

𝐌𝐀𝐋𝐃𝐈𝐓𝐎 ; teen wolf.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora