Cap 5: Plan de ayuda.

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Todo el plan fluía en la mente de Azuka como una máquina a motor, observó su alrededor, los utensilios que podría usar a su favor y a la cantidad de personas que verían el desastre. ¿Merecía la pena intentarlo? No, no en su subconciente que le gritaba alarmado que se quedara quieta. Sí, en su corazón que le gritaba que tenía que ayudar a darle el empujoncito que le faltaba a su amiga.

Chico: ¿podrías hacerme hueco en la mesa para poner el café, por favor?

Azumi: ¡Y-yo! ¡Cla-claro!

Azuka: descuida Azuka, deja yo me ocup...

Y ahí empezó su plan que tanto tramaba en su cabeza. Apartó el plato de las pastitas y con la activación de su mala suerte a su favor, golpeó su taza de café ya servido y se lo tiró encima, manchándose la ropa y quemándose el regazo.

Azuka: [aguantando el dolor] ¡Ups! Que torpe soy.... (¡Aaah, quema, quema, quema!)

Azumi: [levantarse de la silla] ¡Azuka! ¡¿Estás bien?!

Chico: ¡¿Estás bien señorita?!

Azuka: [Resoplar] ¡no! ¡Quema! ¡quema!

Chico: ¡voy a por un paño frío! [Correr a la barra]

Azumi: ¡¿Qué hago, Azuka?!

Azuka: vé con él...

Azumi: ¿cómo?

Azuka: voy a necesitar hielo para enfríar la quemadura. Él sólo a dicho que traerá un paño. Vé y dile que también necesito hielo.

Azumi: ¡no puedo creerlo! ¡¿Lo has hecho a propósito?!

Azuka: [poner los ojos en blanco] ¡Sí! Y no hagas que me arrepienta. ¡No esperes más y vé! De verdad que me estoy quemando...

Azumi: ¡Voy!

Corrió hasta la barra y trás ella, vió al chico, todo apurado, mojando un paño de color morado.

Azumi: ¡Ey...! em... Perdone...

Chico: [dar un pequeño brinco del susto] ah... Es usted señorita. ¿Cómo sigue su amiga? Ya casi está listo el paño...

Azumi: Dice que también le hará falta hielo para enfriar la zona...

Chico: tiene razón... Se me olvidó con el pánico...

Azumi: perdone... Puedo ir yo a cogerlo.

Chico: sin problema, adelante. Está en esa nevera de la esquina.

Azumi: Gracias...

Chico: y por cierto... [Sonreír] Yo no me llamo perdone... Llámame Wataru. ¿Y usted cómo se llama, señorita?

Azumi: [ponerse roja] Y-Yo soy... Azumi...

Wataru: [asentir] Bonito nombre. Igual que tú.

Azumi: [Sobresaltarse] ¡Gr-Gracias!

Mientras tanto Azuka...

Azuka: [tener su cabeza apoyada en sus manos, poniendo los codos en la mesa] hay que ver.... Se vé que les ha ido tan bien el empujoncito que miren dónde estoy... Manchada hasta los tobillos de café y ya ni quema... Que buenas quemaduras me van a salir en los muslos... [Suspirar]

Azumi: ¡Azuka! [Correr hacia ella con el hielo en las manos]

Wataru: Traemos el hielo y el paño.

Azuka: ¿Ahora? Guardate el hielo,  ahora lo que necesitaré será una pomada...

Una risita inesperada la hizo mirar a la barra y allí sentado estaba Kuroyami mirándola.

Una risita inesperada la hizo mirar a la barra y allí sentado estaba Kuroyami mirándola

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Azuka: ¿Kuroyami? ¿Qué demonios hace aquí?

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Wataru: señorita... Me gustaría ayudarla a limpiarse pero...

Azumi: damelo a mí, yo la limpiaré.

Agarró el paño y sus manos ae rozarón, provocando que ambos se preocuparan.

Azuka: [resoplar poniendo los ojos en blanco] (¡Ay, el amor!)

Pero ella no era quién para hablar, porque desde que notaba la pesada mirada de Kuroyami a su espalda, su corazón estaba eufórico.

Siempre contigo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora