Siempre contigo.

Cap 51: Sueño.

El fantasma llegó a casa de Ayumi atravesando las paredes, se relamió e hizo algo inesperado. Se metió dentro de su cabeza y todos quedarón asustados .

Kazuki: ¡¿Qué le ha hecho?!

Diablillo: ¡¿La ha poseído?!

Shin: no... Sólo... Ha poseído su sueño.

Kazuki: ¿Qué quieres decir con eso?

Shin: no tiene cuerpo material. No puede hacerle daño físicamente... Pero sí mentalmente... Se ha metido dentro de su sueño para convertirlo en una pesadilla, asustarla y, o, enfadarla... Para poder usar esas emociones negativas como alimento para hacerse más poderoso.

Kazuki: si es en sueños... ¿Estará bien ella?

Shin: [negar con la cabeza, horrorizado] Por supuesto que no. Puede destruirla mentalmente. Cuanto más poderoso se haga... Es posible hasta que la mate.

Kazuki: ¡Ya me has dicho más que suficiente! ¡No esperemos más! A por él.

Sin vacilar los 3 se lanzarón al sueño de Azuka. Y tras un segundo de sólo ver puro blanco, la nieblina se despejó hasta dejar ver un paisaje dulce de un bosquecito de colores rosados como el amanecer.

Kazuki: esta todo muy.... Tranquilo...

Diablillo: [arrugar la nariz en una mueca de asco] y rosado... Y limpio... Y bonito...

Kazuki: ¿No se suponía que ibamos a ver una horrible pesadilla?

Shin: parece que llegamos justo a tiempo. Antes de que el fantasma encuentre la mejor pesadilla para usarla contra ella hay que despertarla. Sin sueño, no hay conexión y sin conexión a las emociones... El fantasma será automáticamente expulsado de su mente.

Kazuki: ¡Aquí tenemos al experto! [Pegarle un manotazo en la espalda al diablillo]

Diablillo: ¡Aaau! ¡¿Qué demonios haces pendejo?!

Kazuki: Por una vez, te dejo hacer tú trabajo. Haz que se despierte. Cómo es un sueño, no la estarías hiriendo de verdad. Y por lo tanto, venga. Aprovecha. Es tú momento.

Diablillo: ¡ohhh! ¡Claro! [Sonreír de forma arrogante] Ejem... Ya lo sabía... Ejem... Dejárselo al experto.

Se alejó de ellos y tras un rato de estudio del entorno la divisó. Sentada en la hierba muy feliz haciendo un picnic.

Diablillo: ¡Vamos Azuka! ¡Hora de levantarse! ¡Tomaaa!

Con sólo un movimiento de manos, de la nada empezarón a salir miles y miles de ratas y ratones que corrieron despavoridos hasta ella.

Diablillo: ¡Muajajaja! ¡¿Qué te parece eso?!

Azuka alzó la vista ante la masa gris y marrón que correteaba en su dirección y gritó con todas sus fuerzas del miedo. Kazuki y Shin empezaron a cantar victoria hasta que de la nada, saltarón en su defensa dos enormes gatos que arremetiron contra los rodeores.

Shin: ¡Valla! ¡Casi lo tenía! Parece que su subconciente os creó al diablillo y a ti en vuestra forma de gatos para protegerse...

Kazuki: ¡Ese gato enorme y gordo no soy yo!

Shin: [mirarlo confundido] pero... Sí lo eres... Yo te he visto así

Diablillo: [sonreír] ¡Estás gordo!

Kazuki: [resoplar pasándose una mano por el pelo] ¡No soy gordo! ¡Es mi hermoso pelo!

Diablillo: [encogerse de hombros] si tanto te molesta, haber sido un gato pelón.

Shin: ¿Prefieres ser un gato pelón? He oído que tienen problemas porque...

Kazuki: ¡¿Nos centramos en el problema, por favor?!

Diablillo: eso hacemos. Te estamos diciendo la desventaja de ser un gato pe...

Kazuki: [pegarle un capón en la cabeza] ¡En Azuka imbécil! ¡En Azuka!

Diablillo: ¡AAAYY! ¡Mi cabeza!

Kazuki: deja de hacer el tonto y despiertala.

Diablillo: [resoplar] ¡Ya voy! Sólo estaba... calentando...