Versta
Como había aprendido algunas cosas sobre los humanos, concretamente sobre el mío, en los últimos cuatro meses, no fui inmediatamente por Checo.
Quería hacerlo. Cada parte de mí ansiaba seguirlo y corregir lo que hubiera dicho que estaba mal, pero, con toda la fuerza de voluntad que poseía, me dirigí en dirección contraria, hacia la casa de mis padres.
Para mi alivio, ambos estaban dentro cuando empujé la gruesa cortina.
Se me encogió el corazón al verlos sentados juntos sobre los cojines junto al fuego, mi Om-padre acurrucado bajo el brazo de mi Al-padre, como siempre se habían sentado juntos cuando yo era pequeño. Después de tantos años, seguían tan enamorados. Era exactamente como debería ser entre almas gemelas. Una completa yuxtaposición a cómo me sentía con Checo ahora mismo. Como si no pudiéramos vernos a los ojos y siguiéramos perdiéndonos el significado del otro.
Cuando entré, ambos se volvieron hacia mí.
-Hijo, ¿qué pasa? - preguntó de inmediato Om-padre, poniéndose en pie y acercándose a mí.
-Es Checo, - suspiré, aceptando su cálido abrazo. -Se fue y no quiere que lo siga. -
-Vaya. -
Se apartó con una sonrisa divertida e intercambió una mirada con mi otro padre.
-A mí me pasó lo mismo cuando te esperaba. Hay tantos cambios cuando alguien se quedae embarazado. Puede ser difícil ordenar todas las emociones. Para Checo, estar lejos de la familia y los amigos probablemente lo ha hecho aún más difícil. -
Asentí, agradecido por algún tipo de explicación.
-Estoy preocupado, - confesé. -Parece que está a punto de pasar... algo malo. -
No tuve valor para decir lo que realmente pensaba: que Checo parecía estar a punto de odiarme. Nunca parecía decir lo que quería. Todavía me deseaba y me devolvía los abrazos, pero se ponía rígido cuando lo hacía y yo no lo entendía.
-Ven, siéntate, - dijo Al-padre.
-Iré tras él, - añadió Om-padre. - ¿Hacia dónde se fue? -
-Hacia la plaza del pueblo, - suspiré, yendo a sentarme junto a Al-padre.
Me pasó el brazo por el hombro cuando me senté, como si aún fuera un niño, pero no me importó, echándome hacia atrás, sintiéndome tan cansado.
- ¿Qué pasó? -preguntó después de que Om-padre se marchara.
-Quería construir algo llamado 'cuna'. Es para que duerma el bebé. Solo. -
Al-padre parpadeó sorprendido, conteniendo su juicio.-Continúa. -
-No pudo hacerlo y se enfadó porque no quise ayudarle. Se ha enfadado mucho, - dije. -Quiere seguir trabajando y viendo a los médicos humanos, y parece que nos peleamos por eso constantemente. -
-Hm. - Mi padre se quedó en silencio un largo rato, pensándolo. -Sabes, también peleábamos mucho cuando te esperábamos. -
- ¿En serio? - le pregunté.
Asintió con la cabeza.
-Sí, al omega que espera un hijo le pasan muchas cosas. Su cuerpo sufre cambios drásticos,sobre todo las hormonas. Puede ser duro para ellos. Debes tener paciencia. Intenta apoyarlo, aunque no lo entiendas. -
Asentí, sintiéndome de repente avergonzado.
-Parece como si estuviera enfadado conmigo en particular. ¿Quizá no lo estoy apoyando lo suficiente? -
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The Alien's Pregnant Omega III
FanfictionEsto es una adaptacion de la obra de Sienna Sway Checo Sabía a lo que me comprometía cuando decidí quedarme con el alienígena que me había secuestrado. Y aunque la vida con Versta es buena en algunos aspectos, el hecho de estar embarazado lo ha hec...