Checo
Estaba tan acostumbrada al calor de Mukhana que al entrar en el edificio del consejo me entraron escalofríos.Era grande y abierto por dentro, con sólo una mesa y las consolas de comunicaciones, tanto la rota que aún no se había tirado como la nueva sustituta. Cada vez que los veía a las dos juntas,recordaba cómo había reaccionado Versta ante la idea de perderme y comprobaba de primera mano lo perfectamente que había funcionado todo. No me habían apareado con otro alfa y los humanos habían accedido a casi todas nuestras peticiones. Las cosas deberían haber sido como un cuentode hadas a partir de ahí...La habitación estaba hecha completamente de piedra y barro. Empezaba a recordarme a entraren una cueva.
Me rodeé los hombros con los brazos y me acerqué a la consola, recordando inmediatamente que llevaba unas elegantes sandalias doradas y estaba envuelta en una tela sedosa. También me había crecido el pelo. Me había acostumbrado a la estética nassa, pero probablemente resultaba ridícula para el humano medio.
Pensaba en mi cambio de aspecto cada vez que tenía una cita con mi médico humano. Una parte de mí se sentía aliviado al ver a otro humano; el resto quería huir y esconderse. Nunca me había sentido tan confundido.Suspirando, me detuve frente a la consola, me enderecé y respiré hondo antes de introducir elcódigo para llamar.
Un momento después, el rostro del Dr. Smith apareció en la pantalla, con aquella máscara fría y exterior en su sitio, como siempre, y me encogí de hombros, porque esta vez, había innumerables personas detrás de él en la pantalla.
-Buenos días, ¿cómo estás hoy? -Su tono despreocupado hizo que todo pareciera surrealista.
Me encogí de hombros.
-Bien, - me oí decir.
Detrás de él, me di cuenta de que todo el público llevaba chaquetas blancas. La mayoría sostenía cuadernos y bolígrafos. Un par de ellos me miraban con la boca abierta.
-Espero que no te importe que haya invitado a mis alumnos a asistir a nuestra cita, -dijo. -Con fines educativos y para que me ayuden con los análisis. Irán a Mukhana conmigo para ayudar con tu embarazo y parto, así que una introducción temprana es ideal. -Me quedé mirando, incapaz de encontrar palabras esta vez. Estaba claro que no me los iba a"presentar". La parte del análisis era lo único cierto de su afirmación.El Dr. Smith me observó a través de la pantalla, con su mirada evaluadora.
- ¿Cómo te sientes? - me preguntó. - ¿Ha habido ya alguna señal de movimiento? -
Tragué saliva.
-No. Todavía no. -
- ¿Alguna mejoría de las náuseas? -
Asentí con la cabeza, dándome cuenta distraídamente de que no había estado enfermo ni una.sola vez desde que Toto me había traído aquel té especial.
-Son excelentes noticias, - dijo, anotando algo en su tableta.-Ahora, es el momento del examen físico. - Se volvió hacia los demás en la habitación. -Desde esta distancia, lo único que podemos hacer es controlar el crecimiento del feto. Hasta ahora, la velocidad ha sido más rápida que el desarrollo humano habitual, pero los nassa son mucho más grandes que los humanos, lo que podría explicar la diferencia. -Se volvió hacia mí.-Por favor, desvístete, - me dijo.
Siempre lo hacía. Normalmente, me dejaba el cinturón bien apretado y luego bajaba todo hasta las caderas. Pero ya me sentía cohibido con el Dr. Smith allí solo.
Todos me miraban, esperando la gran revelación.Tragando saliva, levanté la mano y tiré lentamente de un hombro hacia abajo, luego del otro.Dejé caer la tela, como hacía a menudo, pero esta vez me sentí avergonzado.El doctor empezó a hablar enseguida, no a mí, sino a sus alumnos. Todos estaban inclinados hacia delante, mirándome el vientre, escuchando atentamente las palabras que yo intentaba desesperadamente ignorar
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The Alien's Pregnant Omega III
FanfictionEsto es una adaptacion de la obra de Sienna Sway Checo Sabía a lo que me comprometía cuando decidí quedarme con el alienígena que me había secuestrado. Y aunque la vida con Versta es buena en algunos aspectos, el hecho de estar embarazado lo ha hec...