𝐈 𝐉𝐮𝐬𝐭 𝐖𝐚𝐧𝐭 𝐘𝐨𝐮 𝐓𝐨 𝐍𝐨𝐰 𝐖𝐡𝐨 𝐈 𝐀𝐦

VI

Christian se encontraba en una de las oficinas de la sede de Red Bull, los teléfonos sonaban cada dos minutos y todo estaba expectante a lo que decidieran lo jefes.

La noticia se a esparcido como es costumbre y negar lo con todas la pruebas aparentes resultaría dañino para ellos, pero mostrar su apoyo a ese comportamiento tampoco lo solucionaría, en ese momento el equipo de estrategia y marketing redactaban los comunicaciones para cualquier situación mientras que lo demás atendían a los patrocinadores que se habían levantado exigiendo explicaciones, algunos incluso querían que se presentará el despido de él tres veces campeón de manera inmediata pero Christian logró apaciguar a los molestos hombre y mantenerlos al tanto de cada situación.

Como si todo esto ya no fuera entrase llego un mensaje de Max diciendo que estaría en quince minutos en su oficina, el hasta ahora director principal de la escuderia no podía decirle a su piloto que no podía llegar al edificio, pero conseguir que entrará con tantos reporteros al rededor parecía imposible así que optó por pedirle a uno de sus compañeros que fuera por el.

Sergio no podía creer lo que leía sin duda todo parecía tan irreal y a la vez tan creíble, lo párrafos detallando la noticia daban toda la alusión de que Max Verstappen tenía un amorío hace años y producto de esto un hija quien hasta ahora estuvo escondida. No especifican las fuentes pero mucho alegan que fue la madre de la niña quien rompió el silencio y se contacto con el padre de Max.

Tal vez era ese extraño sentimiento que siempre aparece cuando esta con el rubio pero Sergio no puede imaginar a Max orquestado algo así más allá del ese odio que la prensa y mucho "fanáticos" le han demostrado, Sergio conoce a su chico y si bien no es perfecto han creado un vínculo entre ellos que sin duda les permitió progresar tanto en su trabajo como en su amistad.

El de ojos cafés no se atrevía a sacar conclusiones esperaría a que Max le dijera si eso es lo que el menor quiera tampoco le sacaría la verdad a la fuerza pero el estaba decidido a quedarse de su lado tal como lo había hecho todo estos años.

Un golpe en su puerta le hizo cerrar su laptop, el sol ya mostraba sus últimos destellos en el horizonte quito su silla del escritorio y se fue a atender la puerta, al otro lado se encontraba su jefe y amigo Christian, el semblante del mayor era de puro exhausto era claro que este día se ha llevado lo mejor de todos.

- Checo, tengo que pedirte un favor - pronunció sin entrar a la habitación.

- por supuesto, de que se trata - el de pecas respondió al instante nunca se negaría a ayudar a nadie que lo necesite.

- puedes negarte si no quieres -esto puso a pensar al menor de ellos- es una situación difícil y si no sale bien tu también podrías quedar afectado

- no es para tanto Horner, se que todo esto tiene solución así que no te preocupes por mi

- ambos son importantes para mi -mencionó esta vez llevándose una mano a la frente y aliviar su semblante. Max esta en camino pero con todo el alboroto allí no puedo asegurar que pase

- entiendo - Sergio se adentro a la habitación y tomo una de sus gorras- envíame un mensaje cuando esté en la puerta saldré y los distraerse hasta que entre

- En serio te lo agradezco y se que el también lo hará

- Solo llámame cuando estés con él y dile que espero que hable conmigo

- lo haré

Sergio salió de la habitación directamente hasta el ascensor no estaría mal dar una vueltas por la ciudad antes de hablar con Max.
Todos esperan que el salga y les diga cada detalle de su vida pero Sergio sabe que no ser tan fácil, Max ha aprendido a mostrar cada vez más como se siente pero algunas veces las antiguas rutinas de comportamiento sacan lo peor de el de ojos azules, Sergio quiere y sabe que debe darle su espacio, el mismo también lo necesita.