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Estando solo en casa, Min Yoongi se encontraba quieto en el sillón de su hogar. Ya que sus tareas se habían terminado y sus padres estaban trabajando, los momentos libres y de ocio eran bastantes. Frente al televisor apagado, observaba su figura como frente a un espejo. Miro fijamente su rostro y levanto dos dedos, fingiendo un disparo.

--Maldito bastardo... --Murmuro.

Su puerta fue golpeada con brusquedad, sacándolo de sus pensamientos y haciéndolo dar un respingo.

--¡Min Yoongi, abre la puerta!

--Amor, no creo que...

Las voces amortiguadas de la pareja de destinados se colaban por los espacios casi cerrados de la puerta.

--¡Déjame, Jungkook! ¡¡Min Yoongi!!

El omega de cabellos azules golpeaba furioso la puerta.
El alfa dio un bufido y se resigno a girar en el sillón, dándole la espalda a la puerta.

--¡Escucha bien, maldito cerdo miserable! O abres la puerta a la cuenta de 10 ¡O tumbare la casa! ¡¿Entendido?!

--Taehyung, ¡No!

--¡1!

Se escuchó mientras una patada mal dada impactaba contra la puerta del alfa. Afuera, durante la patada, el omega había calculado cuidadosamente el lugar donde golpear, pero ante la negativa de su pareja, este lo tomo entre sus brazos en un intento de alejarlo del pedazo enorme de madera.

--¡Suéltame!... --Forcejeo. --¡2!

Grito propinando otra patada.

--Amor, no tenemos dinero como para reponer una puerta.

--Tu eres rico, Kook.

--Aquí no, chiquistrikis. --Susurro el beta.

--¡Hablo de dinero, idiota! --Grito el omega golpeando la cabeza de su predestinado. --¡3!

--¡Auch! Yo no soy rico, mis padres lo son.

--Pero yo soy tu pareja, cumples con todos mis caprichos. --Pucherio. *

Nota de la autora:
No estoy segura de que exista esa palabra.

--¿Y cómo voy a explicar a mis padres que necesito reponer una puerta?

--¡4!... ¡No lo sé, tú eres el de la mente brillante!... ¡5!

--¡Oye, Yoon, yo que tú, abría ahora, sólo te quedan 5 segundos y no quisiera que mi mejor amigo en el mundo tuviera que reparar mi puerta poniendo una excusa tonta para sus padres!

--¡6!

--¡Vamos, Yoon, amigo, no seas un cabrón, por favor!

--¡7!

--Dioses, tengan piedad de mí, de esta alma virgen y desnuda que ofrece su vida a cambio de que se abra esta puerta y que no sea gracias a su pareja...

De rodillas, Jungkook suplicaba al cielo. Taehyung no había dejado de atestar patadas contra la puerta y Yoongi solto un suspiro cansado. No tenía ni quería lidear con ellos en ese preciso instante.

--¡8!

--... Si dejan que la puerta seda, juro por mi madre que caminaré de rodillas hasta el santuario más cercano...

--¡9!

--... Si tuvieran compasión de mí, seguro que alguno de ustedes sabe lo difícil que es ser hijo y sobre todo si tienes que recurrir a tus padres por algo malo que hiciste y necesitas que lo arreglen aunque no sea tu culpa, por favor, por favor, por favor...

Entonces, ¿Me Quieres?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora