Rey Demonio

Capitulo 3

Dolor.

Dolor era lo único que sentía en todo su cuerpo, al abrir sus ojos, la luz del sol golpeó sus ojos con fuerza y castigo.

No entendía nada, pues el dolor en su cuerpo era brutal al mover tanto sus brazos cómo su torso.

Al girar su cabeza para saber su ubicación, noto una cama, donde un hombre descansaba herido, al girar su cabeza al lado contrario, noto lo mismo.

-Despertaste- una voz dijo al pie de su cama, al ver a esa dirección, pudo ver a su compañero de armas, Giles de Rais mirandolo con una mirada sería pero a la vez de derrota.

-¿Cuanto... tiempo llevo...?- Jack pregunto débilmente, su garganta dolía como el infierno pero eso no era lo importante ahora.

-3 días, no pensamos que... sobrevivirias, pero aquí estas, y eso es bueno...- Giles dijo mientras llenaba un vaso de agua para dárselo a Jack, quien lo bebió con rapidez. -Jack, ¿que sucedió?-

-Uh...- Jack miro a Giles quien le miraba con preocupación, de golpe, todo lo sucedido le llegó, haciendo que una mirada de horror apareciera en su cara. -Jeanne!- Jack en un acto de reflejo, saltó de la cama para intentar correr, esto alarmó a todos y mas a Giles, pero al ver como Jack va la de golpe al suelo, reaccionó, levantandolo para sentarlo en la cama.

-¿Que demonios te sucede?- Giles pregunto alarmado y enojado, pues al escuchar el nombre de Jeanne y la reacción de su compañero temió lo peor.

-Jeanne... Ella...- Jack llevo sus manos a su cabeza en forma de desesperación, no sabiendo el destino de su amada y lo peor, no podía dejar de pensar en lo que le harían esos sujetos.

-Jack... Jeanne está...- Giles sólo retrocedió con pasos torpes, su corazón latía de forma desesperada. Al mirar a los ojos a su compañero comprendió que no se trataba de eso. -¿Ella... Fue capturada?-

-Debemos. Debemos ir por ella!- Jack gritó levantándose de golpe, el dolor ya no le importaba, es más, no lo sentía, sólo sentía desesperación, en el querer buscarla, y estar con ella, una vez más. Pero...

Un gran puñetazo se le dio en la mejilla, mandandolo a chocar contra la pared mientras un hilo de sangre salía de su boca.

¿La razón? Giles lo miraba con una mirada llena de odio, un odio tal, que sólo podría ver como su mirada se clavaba en el.

-Todo... Fue tu culpa Jack! Tu no la protegiste cómo debió haber sido! Por tu culpa, ella está en cautiverio por el enemigo!- Giles sólo se agarraba la cabeza con furia. -Todo es tu maldita culpa!- Giles se lanzó contra Jack, quien sólo movió su cabeza a un lado, y de una patada a la rodilla, tiro a Giles al suelo.

-¿Crees que yo quise esto?- Jack rápidamente se levantó del suelo, para sólo darle una patada al pecho de Giles. -Yo intente todo lo que pude! Tu no sabes lo que pasó allí, tu no sabes como sucedió todo!- Cayendo de rodillas al suelo, Jack agarro de la camisa a Giles, para sólo empezar a golpear repetidamente. -Yo no quería que esto sucediera! Yo sólo quería vivir en paz con ella! Tener una familia! Vivir felices! Tener hijos! Pero no! Todo por culpa de Dios! Y sus visiones!- Golpe tras golpe era dado a Giles, quien sólo escupia sangre. -Todo por... seguir órdenes de alguien que jamás entenderá como es vivir... aquí en la tierra-

Jack sólo bajo su mirada, sus puños ardían y la sangre los manchaba, mirando al rostro de Giles sólo pudo suspirar, para levantarse, notando la mirada de odio de Giles, sólo este avanzó, sin detenerse.

No se detendría hasta encontrarla, no se iba a detener hasta matar a cada bastardo que se interpuciera en su camino por estar con ella una vez más.

-Que te quedé claro Giles, iré a buscarla, a rescatarla, es tu decisión si sigues mirandome con odio, o te pones en marcha para ayudarme a encontrarla- Jack le miro, notando como giles era ayudado por enfermeras las cuales apartó con enojo. -Se cual sea tu decisión, la encontraremos- Jack avanzó sin detenerse, sin mirar atrás, sin saber su destino ahora.