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   Habíamos quedado en Times Square

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Habíamos quedado en Times Square.

Rachel Elizabeth Dare nos aguardaba

delante
del hotel Marriot Marquis y estaba completamente pintada de color dorado.

Quiero decir, su cara, su pelo, su ropa: todo. Parecía que la hubiese tocado el rey

Midas. Se hallaba de pie como una estatua con otros cinco chavales, todos pintados

con colores metálicos -cobre, bronce, plata- y todos congelados en distintas

posturas, mientras los turistas pasaban por delante a toda prisa o se detenían a

contemplarlos. Algunos lanzaban unas monedas a una lona
extendida sobre la acera.

El cartel, a los pies de Rachel, ponía: «ARTE URBANO PARA NIÑOS. SE

AGRADECEN LOS DONATIVOS.»


Annabeth, Percy y yo permanecimos unos cinco minutos observando a Rachel sin que


ella diera muestras de haber reparado en nosotros. No se movió ni pestañeó. Yo, con


mi THDA, habría sido incapaz de quedarme tanto tiempo inmóvil. Me habría vuelto


loco.


-Quizá si le damos un empujón... -sugirió Annabeth.


Me pareció un poco malicioso por su parte, pero Rachel no respondió. Al cabo de


unos minutos, un chico pintado de plata se acercó desde la parada de taxis del hotel,


donde se había tomado un pequeño descanso. Se situó junto a Rachel y adoptó


postura de orador, como si estuviera pronunciando un discurso. Ella se descongeló y salió de la lona.


-Hola, Percy -saludó con una sonrisa-. ¡Llegas en el momento justo! Vamos

a tomar un café.

Hay más gente aquí presente, no te va a matar saludar.

Caminamos hasta un local llamado El Alce de Java, en la calle Cuarenta y tres

Este. Rachel pidió un expreso extreme, el tipo de brebaje que le gustaría a Grover;

yo pedí un café y Annabeth y Percy, zumo de frutas. Fuimos a sentarnos a una mesa situada justo debajo


del alce disecado. A pesar de su disfraz dorado, nadie miró a Rachel dos veces.


-Bueno -dijo-, ¿ella es Annabell, verdad?

-Annabeth -la corrigió la interesada-. ¿Siempre vas así?


-Normalmente no. Estamos recaudando dinero para nuestro grupo. Trabajamos

³CENTURIES (PJO&HP)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora