𝐒𝐇𝐀𝐓𝐓𝐄𝐑 𝐌𝐄 [Stefan Salvatore]

𝟎𝟏 | truth or wolfsbane

◇ CAPÍTULO UNO ◇

[ VERDAD O MATALOBOS ]

— ¿Ray? ¿Ray Sutton? — pregunta Kolette al verlo en la barra del bar.

— ¿Quién pregunta?

— Te he buscado por doquier, amigo — comenta sentándose a su lado — Empezamos en Florida. Pensacola. Vi a un joven ahí que conociste antes de irte a Memphis, él me dijo de dos hermosas jovencitas que pudieron confesarme tu ubicación.

— Yo ya me voy — suspira Ray alejándose de la barra.

— No tan rápido, amigo — lo detiene la chica tomando su brazo — Recién llegaste. Los de tu tipo son muy difíciles de encontrar.

Ray se suelta del agarre y se da la vuelta en un intento por irse, pero se encuentra con Stefan detrás de él, quien lo toma por los hombros con fuerza.

— Yo no lo haría — advierte antes de soltarlo.

— Vampiros — asume.

— Somos rápidos, ¿verdad? — comenta la Original — Si, mi amigo aquí es un vampiro. Hipnotizó a todos los del bar, así que no pidas ayuda — cuenta mientras Ray analiza a las personas del lugar, quienes miran y no hacen nada, confirmando lo que Nikolette decía — Sin embargo, yo soy diferente. Otra clase de monstruo. Tengo algo de vampiro, y también de lobo.

— ¿Qué? — inquiere Ray.

— Soy híbrida, ¿ves? Soy ambos — revela — Es que... Yo quiero crear a otros como yo. Como tú eres el primer licántropo que veo en muchas lunas, y hablo en serio, en muchas lunas, necesito que me digas dónde está tu manada — comenta, pero el lobo no dice nada — ¿Y? ¿Dónde está tu manada?

— No pretendas hipnotizarme.

Kolette y Stefan comparten una mirada al mismo tiempo que el lobo los mira. Ella se sienta mientras el vampiro saca una pequeña bolsa de su bolsillo.

— Un whisky en las rocas, por favor — pide al hombre de la barra antes de voltear hacia el lobo y la híbrida — Escucha, Ray. Vamos a jugar a beber. Y al juego lo llamo Verdad o Matalobos.

— Oh, esto será divertido, Ray — asegura Nikolette con una sonrisa.

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Las quejas de dolor de Ray eran ignoradas por Kolette y Stefan. Este último bañaba unos dardos en el vaso de whisky con matalobos y luego se las lanzaba, generando sonrisas en la híbrida.

— Ray, puedes detener esto — explica Stefan — ¿Dónde estará la manada en Luna Llena?

— No puedo...

— Yo sé que tienen un código de honor pero, no me deja detenerme hasta que hables, y yo hago lo que ella diga. Así son las cosas, así funciona todo.

— Hola, señorita Kolette — saluda una humana llegando a su lado — Tengo más información. Me dijo que le avisara si veía algo. Vi al hermano de ese en la casa.

— Pues, gracias, Claudine — agracede — Solo dile a tus amigos que sigan así, cuidando... El vecindario.

La humana se va y Stefan, quien había usado su oído de vampiro, aparece frente a la Original.

— ¿Mi hermano aún nos sigue? — pregunta.

— Se está acercando — responde ella — Tendré que encargarme.

— No, no, no — niega sujetando su mano cuando pasa por su lado, haciendo que lo mire confundida — Déjame a mi.

— ¿Por qué te dejaría ir? — cuestiona Nikolette.

— Sabes bien que volveré — responde Stefan.

— ¿Lo sé?

— Salvaste a mi hermano, soy tu sirviente.

— Ay... En serio que eres tan tedioso — se queja — ¿Qué, no te estás divirtiendo un poco? — cuestiona señalando a Ray.

— Me aseguraré de que mi hermano no nos vuelva a molestar — asegura antes de pasar por su lado.

Stefan no estaba ahí por gusto, podría intentar irse en cualquier momento y eso no le agradaba a Nikolette.

No había intentado irse, pero eso no significaba que no lo haría de tener la oportunidad.

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Horas después, Kolette seguía en el bar con Ray. El licántropo, quien antes estaba encadenado a una baranda, ahora lo estaba a la mesa de billar.

— Escucha, es un proceso de 3 pasos, ¿si? — habla rodeando la mesa — Este es el paso uno; Quiero que bebas un poco de mi sangre.

— Ya te dije dónde esta la manada. ¿Qué más quieres de mi? — pregunta Ray.

— ¿No has oído nada de lo que te he dicho, Ray? — cuestiona — Tengo grandes planes para ti — recuerda antes de cortarse la muñeca con una navaja — Me lo agradeces otro día — lo sujeta del cabello y lo obliga a beber la sangre — ¡Eso es!

— ¿Qué vas a hacer ahora? — cuestiona el licántropo al mismo tiempo que Stefan se acerca a ellos.

— Cumplir el paso 2, Ray — responde la híbrida con tranquilidad antes de romperle el cuello — Has vuelto.

— ¿Lo dudabas? — cuestiona el vampiro.

— Por un segundo — responde — Sabía que pasarías la prueba, te interesa tu hermano. Tu vieja vida.

— No — asegura Stefan — No me interesa nada, de verdad.

— Eres un gran actor, Stefan — comenta Kolette acercándose a él — Por poquito te creo. Y espero, por el bien de tu hermano, que te crea. Jamás deja de importarte la familia, ¿o si? Pero con cada día que bebes, la sangre puede ayudarte a que los olvides.

— Algunas cosas no se olvidan.

— Eso podría tomarse como que te contradices.

— Una cosa es no olvidar, otra es que me interese — señala Stefan conectado su mirada con la suya.

— ¿Y qué o quién es eso que no quieres, o no puedes olvidar? — cuestiona apoyándose en la mesa — No me digas que es Elena. La chica ya pasó a mejor vida y, lo que se hace en estos casos, es olvidar. Además, hay mejores opciones.

— ¿Como quién? ¿Tú? — pregunta recordando que, en varias ocasiones desde que abandonaron Mystic Falls, había notado cómo la híbrida lo miraba. De la misma forma que él lo hacía con la doppelganger.

— Por ejemplo, si — contesta Nikolette pasando su pulgar por sus labios con delicadeza.

Stefan rápidamente toma su muñeca con fuerza y la aleja de él.

— Dije que soy tu sirviente porque salvaste a Damon, pero esto... — los señala — No pasará.

La suelta y sale del bar sin decir nada más, la híbrida solo sonríe levemente. Siempre que ella quería algo; Lo tenía. Y si ella quería algo más con el menor de los Salvatore; Lo tendría. Sin importar nada, como con todo lo que se propone.