ERAS TODO LO QUÉ TENÍA

¿Celos?

Georg:

Después de una larga entrevista, nos subimos a una camioneta dónde ahora y adelante, cada vez que terminará una entrevista o fuéramos a una, está nos recogía. También contratamos a dos guarda espaldas, porque como estamos empezando hacer famosos, no queremos accidentes con nuestros fans, porque hay unos que si son locos. Cuando llegamos a la casa de Gustavo, nos acomodamos todos en la sala. Amelia había salido con sus amigas, así que no estábamos con ella.

Tom:

—Oye Guss.—cuando nosotros llamamos a Gustav, le décimos Guss—

Gustav:

—Soy todo oídos.—

Tom:

—¿A que horas viene tu hermana?—dijo con curiosidad—

Gustav:

—No lo sé, y más si está con Ian.—dijo con una sonrisa—

Bill:

—A mí me cae bien.—

Georg:

—A mi igual.—

Tom:

—Que le ven a ese idiota.—dijo un poco enojado—

Bill:

—Es obvio, es amable, educado, lindo, se viste muy bien. Y es super buena persona con Amelia, que es lo importante.—dijo sonriendo—

Gustav:

—Si, mi hermanita está creciendo.—dijo sentimental.—

Georg:

—A todos nos cae bien, tu eres el único que no te cae bien Tom.—lo mire—Oh acaso, estás ¿celoso?—levante las cejas—

Tom:

—Que, ¿yo?, celoso por una niña, eso jamás. Nunca me he puesto celoso con una niña, y está no es la excepción, están locos.—

Bill:

—Si aja, bueno como sea, ¿quieren pizza?
—dijo con una sonrisa—

Georg:

—Uuuh, si me muero de hambre.—dije tocando mi barriga, haciendo un gesto de hambre—

Gustav:

—Estoy de acuerdo con Georg.—hizo el mismo gesto—

Bill:

—y tu Tom, ¿quieres pizza?—levanto una ceja—

Tom:

—No, no tengo hambre.—dijo medio enojado, se paro del sofá y salió al patio—

Bill:

—Bueno, más para nosotros.—dijo feliz—

Pasaron 30 minutos y la pizza había llegado. Empezaron a comer, viendo televisión, hasta que se acordaron de Tom.

Bill:

Chicos, ¿Porque Tom no a regresado del patio?—dijo pensativo—

Georg:

—Porque tu hermanito se enojo con la broma que le hicimos.—

Gustav:

—¿Y cuál fue?—levanto una ceja—

Georg:

—Nosotros le dijimos que el estaba celoso del amigo de Amelia, y el nunca lo a hecho.—

Gustav:

—Oh, si ya me acordé.—

En ese instante Amelia regresó a casa. Saludos a los chicos con una gran sonrisa, abrazándolos, feliz de verlos, aunque algo a ella le faltaba, pero no sabía que era. Hasta que se acordó.

Amelia:

—Oigan ¿y Tom?—

Bill:

—Esta en el patio.—

Amelia:

—Esta bien, ahora regresó, iré a saludarlo.
—se levantó del sofá, y fue al patio—

Amelia:

—Hola.—el estaba sentado en el césped—

Tom:

—Hola.—dijo secó—

Amelia:

—Qué pasá Tom, porque estás así conmigo.
—toco su hombro—

Tom:

—No pasa nada.—dijo serio—Ademas, que son estás horas de llegar, y ¿porque traes un vestido puesto?—

Amelia:

—Estaba con unas amigas, y también con Ian.
—dijo un poco seria—

Tom:

—Entonces, ¿te colocaste un vestido para el?
—dijo serio y la mandíbula marcada—

Amelia:

—No, claro que no, solo que desde hace mucho no me colocaba uno, ¿cuál es el problema tom?—

Tom:

—El problema es que, te he dicho muchas veces que no me gusta qué te pongas vestidos cuando salgas con un hombre, aparte de Bill, Gustav, Georg y yo.
—dijo serio—

Amelia:

—Tu no eres mi padre para mandarme.
—dijo enojada—

Tom puso los ojos en blanco, y miro a otro lado del enojó.

Amelia:

—¿Acaso estás celoso?—dijo con los brazos cruzados—

Tom:

—Estas loca, nunca me dará celos una estupidez como está.—

Amelia:

—Si claro, entonces porqué te comportas
así.—

Tom:

—porqué me enoja que me desobedezcan.—

Amelia:

—O porqué estás celoso.—

Tom:

—Que no.—

Amelia:

—Mmm, creó qué sí lo estás.—lo seguía molestando, hasta que el se arto un poco—

Tom:

—Que nos, solamente estoy enojado, no celoso.—

Amelia:

—Bien, bien, solo enojado, no celoso.—

Amelia lo abrazó, el no se lo negó, sintiendo el calor del otro. Se separaron un poco, mirándose en silencio, hasta que Tom rompió el silencio.

Tom:

—No quiero volver a verte con un vestido, si no es para mí. ¿Entendido?—dijo un poco dominante, abretando la cintura de ella—

Amelia:

—No prometo nada.—