- Puto perro de mierda, eres un zorro.- Tú empezaste bro.
- Yo no te mordí carajo. - Kyle lo miró con el ceño fruncido mientras se cruzaba de brazos. - Solo te peñizque.
- Yo veo como me las cobro. - Stan también se cruzó de brazos pero solo lo miró divertido. - Jason dice lo mismo.
Ante eso los dos miraron al castaño que se sentaba frente a ellos que lo único que hizo fue mirarlos con burla.
- Ustedes solo son masoquistas.
Kyle jadeó ofendido.
- Masoquista este pendejo, yo no soy masoquista.
Jason soltó una carcajada mientras miraba a Stan.
- Vee, ¿Eres masoquista tilin?
Jason dijo y justo cuando Stan iba a hablar el castaño desvío su atención hacia Cartman que lo había llamado.
- Yo solo quiero que me azote Sophie. - Casi al instante de decir eso Stan se calló y se tapó la boca.
- ...
La mirada del pelinegro se dirigió a Kyle, quién solo tenía la mirada baja tratando de concentrarse en su dibujo.
Stan lentamente alejó su mano y se inclinó un poco hacia Kyle.
- Dime que no se escuchó.
- Sí se escuchó. Muy, muy alto. - Kyle apretó su agarre en el lápiz y miró a Stan sonriendo. - "Yo solo quiero que me azote Sophie". - Repitió mientras soltaba risitas, risitas suaves y bajas.
Esto le dolía.
- ¡Agh! Mierda, ojalá no me hayan escuchado.
- No, ya te hubieran mirado y también estuviera jodiendote Cartman.
- Gracias a Dios.
Stan siguió agradeciendo a todos los santos mientras se reía y conversaba con Kyle nuevamente.
Kyle no sabía cómo largarse de ahí.
...
En la hora de salida, debido a que fue el último día de clases.
El grupo de amigos de Stan que eran un poco más cercanos a Kyle lo invitaron a salir.
Todo para despedirse, supuestamente.
Entre el grupo de amigos estaba Sophie.
Kyle no quería ir, pero tampoco quería que se tomaran eso a mal.
Accedió porque también iba Thomas.
Llegaron al Mcdonald's después de un rato, se sentaron y conversaron tranquilamente.
Todos menos Kyle y Thomas.
Thomas solo conversaba con Kyle levemente, al ver el ánimo de Kyle era comprensible.
Todos empezaron a pedir diferentes cosas, al cabo de unos minutos los pedidos fueron entregados y la mayoría empezó a comer.
Stan estaba más distraído en hablar con Sophie, Kyle lo miraba desde el otro lado de la mesa.
- Kyle, ¿Tú no comerás nada?
El pelirrojo reaccionó incómodo y sonrió nervioso.
- Ah, comeré en casa. Igual no tengo hambre.
- Tienes que comer algo loco, toma, come una de mis papas y un Nugget de Thomas.
Kyle se sentía horrible y avergonzado.
- ¿Qué pasó?
La voz de Stan resonó otra vez, recién.
- Kyle no pidió nada.
- Comeré con Thomas. - Dijo Kyle apresuradamente. - Comeré con él.
Todos miraron a Kyle, incluso Stan, pero fue momentáneo.
Kyle se llevó a la boca una papa y un nugget.
Esa maldita miseria bastó para que el asco se apoderada de él junto a las náuseas.
- ... Iré al baño.
- ¿Estás bien? - Thomas se acercó a Kyle con preocupación y empeoró cuando el pelirrojo negó.
- Tengo ganas de vomitar, iré al baño. - Dijo en un susurro.
Kyle se encaminó hasta el baño con vergüenza, fastidio y tristeza.
¿Por qué era tan patético?
Mojó su cara y se negó a vomitar, respiró profundamente por unos minutos para después salir del baño hacia la mesa, ya todos habían terminado.
- ¿Estás mejor?
Preguntó Francis.
- Sí, no te preocupes.
Odiaba esto.
Pero a pesar de todo seguía pensando en Stan.
Y Stan...bueno, cada quien tiene sus propias preocupaciones.
Cuando todos se iban, Kyle se sentó en una mesita alejada de Stan, Sophie y Red. La mejor amiga de Sophie.
Pasó minutos y nunca se interesaron en él.
Hasta después, al parecer Stan se acordó que él también había ido.
El pelirrojo se acercó hasta la mesa de los otros chicos y se sentó al lado de Stan, aunque en ese momento no quería ni tener al chico cerca.
- En unos minutos me vendrán a ver, así que de una vez me voy despidiendo. - Dijo mientras sonreía.
Stan se acercó a Kyle con una sonrisa.
Vaya.
- Oye, de aquí no nos volvemos a ver en tres meses... - Un silencio se hizo presente en el cual Stan vió como Kyle lo miró por unos segundos y desvío la mirada. - Vamos Kyle, la última mordida antes de las vacaciones.
- No, déjame Stan.
- Por favor, ¿sí?
Kyle negó, una y otra vez.
Pero Stan era malditamente insistente y tenía control sobre él.
Demasiado control, puta madre.
- Haz lo que quieras. - Dijo ya rendido y avergonzado.
- Bien. - Y con una sonrisa se acercó al brazo del pelirrojo.
- ¡Agh! Zorro de mierda... - Dijo mientras se aguantaba el dolor.
- Es para que te dure los tres meses.
Kyle suspiró, odiaba ser tan débil ante él.
Odiaba amarlo.
ESTÁS LEYENDO
Hola🌱
Fiksi Penggemar"Hola otra vez. ¿Cuánto ha pasado?" - Kyle Broflovski. El bloc de notas de Kyle, y leves contextos.