Caliope.
Encontré la paz en la soledad de mis iris;
siendo una diosa como Caliope y no como Osiris.Con el alma azabache y la piel coca,
con un hueco en el pecho que cada vez que siente, se alborota.Soy el desafío vulgar de la idiosincrasia del pobre,
por dentro de oro y por fuera, disimulándolo con cobre.Soy la rebeldía hecha tragedia humana por accidente,
El error 47, producto de código fallo,
un día mi nombre será como un rayo;
lo verán desde oriente hasta el occidente.Tan humana como el carmesí de mis arterias;
tan artista como para desdoblar mis ángulos
y escribir poemas sobre mis aristas.
ESTÁS LEYENDO
El jardín de mis musas perdidas
Poetry«Una jaula de oro no deja de ser una jaula».✨ No hay peor cárcel que la mente propia, y es ahí donde alojamos nuestros deseos más anhelados, hasta los más prohibidos... Incluso los más macabros. Guardamos un espacio en nuestro subconsciente para tod...