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Soy muy amiga de Alfonsina y hace poco se estrenó La Sociedad de la Nieve, película en la que ella participaba interpretando a Susana Parrado, sin duda había sido una de las películas que le exigió más profesional y emocionalmente. Se estaría presentando en un cine de España y ellos estarían como invitados, no dude ni un segundo en ir para darle una sorpresa.
Tome el vuelo, mientras veía la ventana asombrada por la hermosa vista del cielo. Apenas baje me dirigí hacia el hotel donde me quedaría por una semana para de paso recorrer un poco y disfrutar. Esa misma tarde era la función, me di una ducha para desprenderme todos los olores, me vestí, maquillé un poco y tome dinero, por si lo necesitaba, para después dirigirme hacia el cine con la emoción a flor de piel.
Había demasiada gente, no me refería a el hecho de que el cine estuviera lleno, me refería a que afuera de este mismo había demasiada gente, la cual no tenía boleto, esperando la llegada de los actores, preferí no quedarme para evitar los empujones, entre a la sala y ahí esperé a la hora de la función. Admito que no la había visto, quería esperar a verla con Alfo para que de paso me relatara su experiencia, pero ahora que estaba viéndola en pantalla grande no pude evitar derramar todas mis lágrimas hasta más no poder, me conmoví demasiado a tal punto que estaba atónita.
Después de la función entraron los actores, uno por uno fue exponiendo su versión y agradeciendo el reconocimiento que estaba teniendo la película. Mi amiga irradiaba dulzura, ternura, cosa que siempre le recalqué. Había un actor en especial que llamó mi atención, sus rulos eran rubios y su sonrisa me derretía de ternura, quería conocerlo, saber más de él, era un extraño impulso. Se despidieron y salieron antes que todos de la sala, sin embargo para evitar gente fueron los últimos en salir de el establecimiento.
En cuanto vi a Alfonsina charlando con otros actores animadamente me acerqué por atrás sigilosamente. Haciéndole señas a los demás para que no me delataran
¡Buh!- exclame fuerte mientras aparecía por detrás de ella, dio un pequeño salto tocándose el pecho por el susto que paralizó un segundo su corazón
¡AY!- gritó para después mirar enfurecida a mi dirección, al ver que era yo su cara cambió radicalmente por una de sorpresa y felicidad- ¡Maryyy!- nos fundimos en un abrazo que duró un prolongado rato
¡Sos tremenda actriz!- exclamé orgullosa mientras me separaba de sus brazos
¿Estuviste todo el rato?- preguntó. Asentí- Deja te presento con todos- me tomó de él antebrazo para guiarme donde estaban todos los actores en bolita.
Todos me miraban con atención, haciéndome sentir extraña- Ella es Mary, mi mejor amiga- Alfo me presentaba emocionada. Todos me saludaron y se presentaron
