Capitulo 4

38 13 1
                                    

Capítulo 4

Serena

Me retiro a mi habitación, apenas y podía creer que ayer me pase un dia preocupada por él y ni siquiera fue capaz de decirme nada, y hoy simplemente me ignora.

¡¡PUES QUE SE VAYA AL DIABLO!! —Pensaba  a punto del llanto de la rabia contenida. Me quité la ropa y me metí a la ducha asegurando antes la puerta para que mi estupido esposo no se le ocurriera entrar.

Después de ducharme ya más tranquila, me puse mi pijama y me acosté, realmente estaba agotada.

Pensé en tantas cosas… En la clínica mi trabajo era realmente importante, me gustaba ayudar, mi equipo y yo hacíamos excelente trabajo, luego estaba esa promoción para ocupar un puesto en el consejo directivo… no podía tomarlo cuando en mi matrimonio se podía notar que estaba tenso.

Y así pensando tantas cosas, recordé que no había revisado unos datos y me puse a checar mi tableta…

Termine y me dio sed y baje por un vaso de agua en la sala todos charlaban, pude notar a Darien distraído, que no era para menos, seguro mi actitud y reacción y ese cambio drástico de humor, lo desconcertó aunque imaginé que se dio cuenta por que me habia puesto asi… ese estupido de la sanguijuela de su hermano me había ignorado.

Afortunadamente nadie me noto, y regrese a mi habitación con un vaso de agua.

Pasada la medianoche entra Seiya a la habitación, encontrándome leyendo, no me dijo nada pues asumo que se dio cuenta que estaba muy enojada, realmente estaba intrigada y  le pregunte por que no respondía su celular, o por que no me aviso que estaba bien, tras una pelea se calmó, y se metió a bañar y regreso después de colocarse la pijama se acostó en la cama junto a mi. Me abrazó y me dijo lindas palabras que de un momento a otro terminamos haciendo el amor como hace mucho no lo hacíamos.  En mi mente rogaba para esa noche pudiera darle ese hijo a mi amado esposo

Así transcurrió la semana entre arreglos y preparativos para la cena ya se acercaba Nochebuena.. A veces todos nos reuníamos en la cocina a preparar los alimentos, haciamos bromas y reíamos, amaba ese ambiente y el calor a hogar, pero sobre todo amaba tener a mi familia reunida.

—Bueno familia, me retiro… tengo que ir al pueblo a hacer unas compras y… nos vemos para la comida. —nos anuncia Darien, que lucía atractivo con playera blanca, unos pantalones estilo militar y unas botas negras...  se veía más juvenil y más relajado, no entiendo por qué sigue soltero.

Mis suegros les hicieron unos encargos al igual que las chicas, Seiya me invita a ir de compras y accedo encantada.

—Gracias amor por invitarme—digo dándole un beso en la mejilla mientras enciende la camioneta. El solo se limita a sonreír.

—No hay de qué cielo. — me dice y así conduce hasta el gran centro comercial. Llegamos y vamos a comprar. 

Realizamos las compras de los obsequios para la familia, unas cosas para ambos. Yo me dirigía al área de bonetería cuando a Seiya le entró una llamada..

—Mientras haces las compras, respondo esta llamada, saldré al pasillo porque aquí dentro hay mucha interferencia.

Término de elegir mis compras, veo unos bolsos que me encantaron y Seiya no volvió… Habían pasado tres horas desde que se fue a atender esa llamada, le marcó a su celular y suena ocupado. Desesperada, salí de la tienda con mis compras y no vi a mi esposo en todo eso.

Furiosa salí del establecimiento a esperar un taxi que me llevara de regreso a la Finca Shields, cuando escuche un claxon sonar cerca y alguien gritaba mi nombre, grande fue mi sorpresa al darme cuenta que se trataba de mi cuñado… Darien…

—Hola. ¿Qué haces aquí afuera?¿Dónde está Seiya?—preguntaba Darien confundido.

—Lo que hago aquí, pues casual tomando un baño de sol ... y en cuanto a donde está Seiya eso mismo quisiera saber yo…. —respondo furiosa y es cuando de repente veo su cara de asombro y me doy cuenta que la he pagado con quién menos debe..—Por favor Darien discúlpame. No debí hablarte así. Perdón.—me disculpo por qué no sé dónde meter la cara.

Darien sonríe y acepta mis disculpas. No sé qué me pasa con el que me siento… Rara…

—No te preocupes mujer, ¿Vas para la finca? Te llevo. —¿Llevarme? ¿Acaso no se da cuenta que me pone nerviosa? —Si, por favor. — respondo sin pensar y siento que me sonrojo.—Mejor me voy en taxi. Tu seguro tienes algo más importante que hacer y yo … —pero Darien me interrumpe mi verborrea nerviosa.

—Para nada. Ya he terminado, y si te dije que te llevó a la finca es por qué justamente ya iba para allá, así que no me cuesta nada. Anda, dame tus paquetes y sube a la camioneta.

Después de dudar me decido a subir a la camioneta. Seiya que se vaya al diablo. Me queda claro que me va a escuchar.

**********

Nota de autor

Andale Seiya la que se te armara jaja

Se Amaban Donde viven las historias. Descúbrelo ahora