No juegues conmigo. (Fanfic boys before flowers)

Siete.

Harley.

¿En verdad hice algo malo? ¿Si lo hice?, ¿por qué estoy esperando en el aeropuerto para despedirme de él?

Estoy sentada en la sala VIP del aeropuerto junto con los Five S.

- ¡Ash! ¿Cuánto tardara Johan? -pregunta Luke cruzando los brazos.

-Tal vez ya se fue -contesto tratando de que nadie me oiga, pero Luke tiene el oído muy agudo.

-Se nota que eres nueva al ser parte de los Five S - ¿soy parte de ellos?, ¿desde cuándo?-. No sé porque Johan se invitó.

-Ni yo.

Me recargo en el sillón y me dejo llevar por el silencio de ellos.

- ¿Esto no les recuerda a cuando se fue Emily? -pregunta Max interrumpiendo mi maravilloso momento de silencio.

Los cuatro asienten con la cabeza y en la próxima media hora se ponen a platicar sobre Emily, sin embargo nadie menciona que ella haya iniciado el ritual de los Five S, pero si mencionan algunas travesuras en las que participo. Han hecho infinidad de juegos, como la búsqueda del tesoro, acertijos, apuestas y hasta citas a ciegas.

Entonces aparece él con su maleta, una pequeña maleta de la cual nadie pregunta nada. Nos voltea a ver, pero sus ojos se guían rápidamente hacia mí, obligándome a mirar a otro lado. ¿Pero porque lo hago? Me armo de valor y le digo lo que realmente debí de haberle dicho a él y no a Emily.

-Johan, ve tras ella. Si te gusta, debes...

-Harley, a eso voy -me interrumpe.

- ¡¿Qué?! -gritan los demás.

-Esta jovencita me convenció. Hablare con Emily de nuevo -me toma por los hombros-. Le diré mis sentimientos aunque no les asegurare mi regreso, chicos.

- ¿Qué esperas? Ve -le dice Luke.

Los cuatro se acercan a él y lo abrazan envolviéndome a mí como si fuera parte de un sándwich, siendo tan pequeña siento como si me exprimieran entre ellos. Logro escabullirme de entre sus abrazos y respiro profundamente para que mi pulso vuelva a la normalidad.

Observo detenidamente una relación de amistad muy unida, sonrió y finjo que no me duele el verlo partir y dejar a sus amigos con la cabeza llena de mentiras. Está a un paso de irse a Francia y dejarme con los demás o más bien Luke.

-Gracias -contesta firmemente en frente de mí-. Seguiremos en contacto -me abraza y me susurra al oído-: No les digas la verdad. Le prometí a Emily que la cubriría -me suelta-. Me complace haberte conocido -me toma de la cabeza y besa mi frente delicadamente, sus labios se sienten calientes y suaves, pueden derretirme completa.

-Bueno, me voy -se despide de todos y desaparece de nuestra vista al pasar la puertas que lo conducen a su avión.

Nos damos la media vuelta y continuamos nuestro día, yo tendré que irme con Luke para que me deje en mi casa, pues un taxi hasta allá sale demasiado caro. En lo que caminamos me doy cuenta que Luke y yo nos resacamos en la caminata.

-Tú tampoco te rindas tan fácil ante el amor -al escucharlo me percato de su sinceridad.

-No pienso hacerlo.Me toma por los hombros y acerca su rostro a mí, rápidamente pongo mis brazos como escudo y me protejo.

-Por eso, Harley. Tú y yo deberías... -me es imposible escuchar la última palabra pues una señorita habla por el altavoz anunciando un vuelo.

Sin que se dé cuenta, él sigue su camino y yo me quedo con la duda de que me habrá dicho hace algunos segundos atrás.

Al día siguiente en receso, Katie y yo nos acercamos a la barra del desayuno, hoy toca buffet asiático, lo que quiere decir día de sushi gratis. Pongo todos los posibles sushi en mi bandeja más algunos otros platillos del buffet. Katie toma arroz y un poco de carne que no sabemos bien que salsa la cubre. Tomamos asiento en nuestra mesa favorita y nos disponemos a comer todo lo que nos servimos, como de costumbre no tardo en empezar a vaciar mi plato.