Controlando mi vida amorosa (SatouxSaiki)

Extraño

Saiki Kusou es nuestro pobre protagonista psíquico que día a día da lo mejor de sí en parecer normal y llevar una vida tranquila.

Por intentar esto escapa de muchas cosas.

Se aleja de sus anormales “amigos”, trata de mantener un perfil bajo en la escuela. Como nunca funciona y siempre se ve envuelto en todo tipo de desastres… al menos busca pasar desapercibido de todo.

Y bien… nuestro psíquico tiene una vida desastrosa.

Tal parecía que lo tenía todo bajo control.

Entonces sucedió.

Un sentimiento extraño se apoderó de su ser , era fastidioso, incómodo, ponía su corazón en aprietos.

Como cualquier otra anormalidad que le llegaba decidió escapar de él.

Lo ignoró por completo… o eso pretendía, resultó ser muy difícil escapar de tu propia mente y cuerpo, no era como dejar atrás a Nendou en sus momentos mas vergonzosos. Esto aparecía en sus únicas tardes tranquilas, a veces los acompañaba con un suspiro.

Se prometía no pensar pero ahí estaba a solo dos minutos luego de esa promesa.

El culpable no era nadie mas que Satou Hiroshi, un chico promedio , nada especial, olvidable para cualquiera, lo perderías aunque lo siguieras con la vista.

¿Qué veía en el?... Eso mismo, la vida tan soñada para Saiki. Admiración fue lo que sintió este, seguido del impulso de quererlo como amigo, nada lo haría sentir más normal pensaba.

Luego de ser llamado raro por Satou, Saiki se recuperó del golpe y decidió solo seguir con su admiración.

Todo cambió para el en un pequeño encuentro inesperado.

El psíquico se ocultaba en la biblioteca por la hora del almuerzo, sentado en cuclillas detrás de los libreros. Un libro calló en su cabeza mientras meditaba sus desgracias.

La mente de Satou era tan poderosamente promedio que Saiki se percató de su presencia cuando se disculpaba por lo ocurrido.

Fue tan amable, a pesar de no tener la culpa de que el libro que estaba colocando en su sitio se desplazara muy atrás y lo golpeara a él, que se escondía de forma rara detrás del librero.

Saiki no habló, no se movió, solo lo observó.

Satou movía la boca, no prestó mucha atención a lo que le dijo pero escuchar su voz tan cerca era relajante.

Su estómago se revolvió por la sensación.

‘¿Estas bien?’- La tan ansiada amistad que creía perdida ¿podría llegar? ¿Cómo sucedería? Ni siquiera había respondido una palabra, esto solo sería un encuentro casual.

Conocía bien a Satou, no podía existir alguien más perfecto como persona, seria el mas tranquilo con quien jugar video juegos y otras cosas que lo harían sentir  normal……pero… en ese momento, no se sentía normal como el creyó… no como el quería.

Con los pensamientos en cascada, se percató del terrible silencio. Satou presintió molestia, luego de una vista apenada, buscaba escapar inclinándose y disculpándose de nuevo.

‘Estoy bien’ – Las palabras que salieron de su boca con prisa a la espalda de Satou fueron temblorosas. El chico volteó un poco confundido por notar un tono para nada molesto, así que suspiró aliviado.

‘Que bien’- La sonrisa de Satou era una sincera y común, fue lo que pensó Saiki luego de que una corriente recorriera su cuerpo quedándose alojada en el pecho y rostro.