Juro que intenté esquivarla, juro por Dios que lo intenté. Pero cuando me di cuenta, aquella bala ya había atravesado el delicado tejido de mi corazón. Mis manos ya se encontraban ensangrentadas por tus necias e insignificantes palabras. Unas sucias palabras salidas por la boca de una estafadora, de una atrapasueños.
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Tienes que Perderte para Encontrarte
PoetryCada capítulo es un mundo de diferentes metáforas que te llegarán al corazón.