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¿Dónde están los fuegos artificiales?

Noto cómo sus dedos trazan círculos alrededor de mis manos.
Segundos después, un ardiente aire golpea mis labios, el fuego me quema, pero en lugar de quemarme en lugares satisfactorios, eróticos... Me incendia el corazón, y de algún modo, me congela el resto del cuerpo, mandando un enorme escalofrío por el contorno de mi columna vertebral.
Y tan solo en el parpadeo de un ojo sin vida, siento cómo sus labios de hielo se juntan con los míos, congelando de esta manera mis labios también, pero no congelándome bajo su hermoso hechizo, bajo el poder de sus ardientes labios, como ella lo hacía, sino congelándome en el silencio de mi alma, en la oscuridad del hecho de que no siento absolutamente nada.

¿Dónde están los fuegos artificiales?

Laura Calzado Sanz.-