Todo pasa por algo

Nuevo comienzo

Stefan

Tengo ganas de partir en dos a alguien, no puede ser que a las 8:30 de la mañana me estén tocando la puerta.

-Hijo levántate que vas a llegar tarde.- dice mamá del otro lado de la puerta.

Me levanto y le abro la puerta. No me sorprende que esté bien vestida, con un vestido y zapatos de marca, sin duda Luciana Smith tiene buen sentido de la moda, pero eso no quita que me venga a tocar mi puerta tan temprano.

-Y yo para que necesito levantarme temprano si se puede saber?- respondo seco y me devuelvo a la cama.

Ayer me desvelé en las carreras de moto, estuvo increíble, bebí y la pase bien con unas nenas, sólo de recordarlo se me sale un sonrisa pícara, me da pena todos esos hombres pendejos que se enamoran y se pierden de tremendas bellezas. En fin cada quien y sus mierdas.

Mientras tanto yo a disfrutar de mi soltería no se me da bien eso de andar de perro faldero atrás de una chica, prefiero que ellas vengan a mi, y pasar el rato, comerles la boca, quitarles la ro........

-Donde no te levantes ahora mismo te cancelo todas las malditas tarjetas, niño del diablo.- Ya se me hacía raro que mi papá no me haya venido a buscar.

Me levanto enojado a abrirle la maldita puerta.

-Princess que esperas para vestirte y largarte a la universidad.- Papa está vestido con su traje negro, porte autoritario, barba, pelo café y ojos celestes.

-En que momento eh dicho que iba a ir.- respondo el más que nadie sabe que yo no quiero ir hoy.

-A mi no me importa lo que tú me digas, soy tu padre, así que tienes veinte minutos para arreglarte.- me tira sus miradas venenosas y se larga.

Como odio levantarme temprano.

.......................

Ya vestido y bañado, bajo a la sala.

Encuentro a mis padres en la mesa, mi papá con su cara de enojado y mamá me dedica una sonrisa amable.

-No vas a ir a la universidad.- dice mi padre como si nada, hace poco me estaba molestando con ir a la universidad y ahora no.

-Mira como me importa.-respondo con sarcasmo

-Vamos a ir a la empresa.

-Al otro infierno.

-Donde sea pero vamos.-habla mientras se toma el jugo .- Hay que terminar el trabajo de hace un mes.

Ruedo los ojos, no es que me encante eso pero no queda de otra, así que sin decir más nada me pongo a comer. Mi papá se levanta y voy con el. La empresa MCcarteny, una de las más prestigiosas del mundo, y eso me gusta, me gusta que se arrodillen ante mi, me gusta mandar y si ahora lo hacen, cuando sea dueño de esta empresa aún más.

Me pongo andar hasta su oficina cuando llegamos al quinto piso, la empresa de Madrid se podría decir que es la más importante de todas, más de mil trabajadores.

-Buenos días señor.- la secretaria de mi padre, parece loca mirando a mi padre como la última maravilla del mundo y no la culpo, los MCcartney somos eso.- Joven

Me saludo y yo paso sin decirle nada, no se me da bien andar hablando con los empleados, hay límites y yo no me rebajo, me importa una mierda la educación.

-Pero mira a quien tenemos aquí Stefan MCcartney heredero de toda la fortuna de tu padre y abuelo que afortunado.- Leonardo Miller más conocido como la peor pesadilla de mi vida, simplemente lo miro y tampoco le digo nada solo voy al sitio que me corresponde, al lado de mi padre.

Nos sentamos y comienzan hablar de no se que, y así se van dos horas, ya estoy que me duermo, por eso mismo no me gusta esto, hablan y hablan y no cierran la puta boca, que estrés, les quiero meter un tampon en la boca.

-Stefan sabes que lárgate de aquí, que me estás pasando tú pereza de mierda.- me mira mi padre con enfado y como no me interesa me largo.

Cierro la puerta y veo a una chica muy guapa en frente mío, rubia, piel pálida, labios rojos, alta y con un cuerpo que Diosssss. Pero pasó de largo ahora no quiero un polvo rápido así que paso y veo de reojo que casi se le cae la baba por mi, en fin acostumbrado.

Al medio día cojo mi auto y me largo de la empresa, en un bar me encuentro a Ryan, mi amigo, con el que voy a las carreras de moto.

-Eyyyy, como andas princesa.- me harta ese apodo, así que le lanzó una mirada intensa que le hace borrar la sonrisa

-No empieces que te voy a romper la cara.

-Tranquilo, como fue tu primer día de clases.- qué clases ni que mierda no quiero hablar de eso

-No fui.- le respondo sin más y pido un vaso de whisky

Después de un largo rato me llega una notificación, la abro y es un mensaje del grupo de la universidad.

"Fiesta de bienvenida, te esperamos"

Con que fiesta en la universidad, interesante miro a Ryan con una sonrisa y este frunce el ceño.

-¿Que te dio?.- me pregunta confundido

-Tenemos una fiesta más tarde.

Me sonríe y seguimos con los tragos, no fui al primer día pero eso no quita que no sea bienvenido, ademas tengo todo el derecho de conocer a mis "compañeros". Llega la hora y nos vamos a la fiesta.

Veamos que me espera esta fiesta de bienvenida.