A salvar lo que me queda

1- Comienzo

Narrador:

—Tendremos que irnos —dijo la reina.

—No… podemos seguir peleando, mamá, no tenemos que irnos —respondió la joven leona.

—Nos iremos Sasha, no se discutirá.

La joven leona agachó la cabeza y le respondió:

—Entendido madre.

—Leones, saldremos del Reino.

Al decir eso la reina los leones empezaron a rodearlas para salir de allí y dirigirse lejos del Reino.

Mientras escapaban, los leones fueron atacados dejando a pocos, los que quedaron se encargaron de llevarse lejos a la reina y princesa, aunque antes de salir fueron atacados por detrás, los leones pelearon hasta morir, a la reina no le quedó más que correr junto a su hija, corrieron hasta el límite cuando…

—¡Ahg! —la reina gritó de dolor al recibir la mordida— ¡Sasha vete! —la reina empezó a pelear para darle ventaja a su hija.

La princesa logró escapar de allí, aunque supo que ya había salido del Reino, siguió corriendo, corrió y corrió, tenía que pasar un gran desierto, si se quedaba allí sería presa fácil para los depredadores.

Corrió con todas sus fuerzas, ya se estaba cansando, tenía sed.

Al final vio un gran campo verde a unos kilómetros, habían animales, cebras, elefantes, monos.

Cada vez se iba acercando más, cuando llegó al campo verde ella se desmayó.

Al despertar vio a animales alrededor de ella y justo arriba un ave azul, un cálao de pico rojo, este pájaro al verla despertar, se fue hacia una gran roca.

—¡Señor! ¡Señor! —exclamó el ave.

—¿Qué pasa Zazú? —preguntó el Rey.

—Casi a las afueras del Reino hay una joven leona rodeada de animales.

—Debe ser una de nuestras leonas.

—No señor, a esa leona nunca la había visto.

—Bueno, le diré a la Guardia del león para que inspeccionen.

El ave asintió y se fue, el Rey fue a una cueva donde habían 5 animales, diferentes especies.

—Papá ¿qué haces aquí?—preguntó el joven león.

—Kion, hijo, necesito que vayas a inspeccionar lo que sucede a las salidas del Reino.

—¿Qué es lo que ocurre?

—Zazú me dijo que había una leona rodeada de animales.

Pov Sasha:

Al despertar me encontré con varios animales alrededor mío, me quedé algunos minutos allí mirándolos, ellos se apartaron y yo pude levantarme para caminar.

Me fui acercando a una gran roca, varios animales me veían raro, ¿Qué tengo? Me pregunté, seguí caminando, me sentía incómoda con las miradas de los animales, me miraban como si pareciera algún desterrado.

Cuando ya estaba cerca, vi a un grupo de animales, parecía que el que iba liderando era un león, pero al lado de él iba un león más grande.

El león más grande miró al león y le dijo algo, no le presté tanta atención hasta que se dirigieron a mi

—¿Es ella?—le preguntó al más grande.

—Si.

—¿Quienes son? —pregunté.

—Yo soy Simba, el rey de las prederas.

—Y yo soy kion, hijo del rey y líder de la Guardia del león.

—Entonces estoy en las praderas.

—Y tu ¿quién eres? —me preguntó kion.

—Mucho gusto, soy Sasha.

—¿De dónde vienes? —ahora quien preguntó fue Simba.

—Yo vengo de unas tierras lejanas, fueron destruidas y por eso estoy aquí.

—¿Y la reina de ese lugar? —Preguntó Simba.

—Está muerta —agaché la cabeza al recordar su muerte.

—Entonces estás sola.

—Si.

—Pienso que deberíamos dejar que se quede padre.

Simba asintió y se acercó a mi.

—Bienvenida a las praderas.

Sonreí y ellos me dirigieron a la gran roca.