<< Mi capitán Ace >>

005

Venus despertó un poco aturdido, después de frotar su cabeza recordó por qué estaba sintiendo dolor. Se levantó de la cama y fue a cubierta a buscar a su capitán, lo encontró en la cocina junto con el sujeto que lo golpeó, ambos estaban comiendo y bebiendo todo lo que podían.

"¡Oh capitán!" exclamó Venus como si hubiera pasado mucho tiempo desde la última vez que se vieron. "¿Quieres que te prepare algo?" se sentó al lado de Ace.

"No, está bien y... siento lo de ayer", dijo Ace rascándose la nuca. "Oh, él es Deuce, nuestro nuevo nakama", añadió con una brillante sonrisa.

"Hola, soy Venus", dijo Venus haciendo una reverencia y extendiendo la mano.

"¿Estás bien? Siento haberte golpeado", dijo Deuce avergonzado.

"No te preocupes, estoy bien", respondió Venus con una sonrisa tranquilizadora.

Deuce aceptó el apretón de manos, pero sintió algo extraño en las manos de Venus al soltarse, decidió no prestarle mucha atención. Después de las presentaciones, continuaron su viaje, ahora con tres miembros en la tripulación.

"Oh, por cierto, Venus, ¿cómo es que tu daga me dañó?", preguntó Ace repentinamente, recordando la pelea.

Deuce frunció el ceño confundido. Ace había usado la Mera Mera no Mi, una fruta del diablo de tipo Logia, por lo que los ataques normales no deberían haberlo dañado.

"Bueno, utilizo dos dagas para defenderme", explicó Venus levantando su capa para mostrar que una daga estaba sujeta a su muslo por una correa. "Esta es una daga normal, y la que tengo en mi brazo izquierdo es una daga hecha de kairoseki", añadió con una sonrisa tímida.

En la siguiente isla, conocieron a Saber, quien también se unió a la tripulación. Al igual que Deuce, Saber sintió algo extraño al tomar la mano de Venus.

Saber era un hombre de tamaño mediano, musculoso, con piel ligeramente bronceada, largas piernas y cabello castaño hasta los hombros, además de una barba corta.

Era un día normal, la hora del desayuno. Los cuatro se sentaron y Venus sirvió la comida. Venus se encargaría de la cocina, ya que el capitán había elogiado su deliciosa comida.

"Serás nuestro cocinero", dijo Ace mientras se llevaba otra porción de carne a la boca. "Tu comida es deliciosa", añadió con satisfacción. Deuce y Saber estuvieron de acuerdo con su capitán.

"Está bien, capitán", respondió Venus con una sonrisa.

Deuce y Saber notaron que Venus no comía mucho. Aunque se servía grandes porciones de comida, solo probaba un bocado y luego cambiaba sus platos llenos por los que Ace ya había terminado.

"¿No te parece extraño estar rodeado de hombres tan guapos?", preguntó Saber burlonamente a Venus.

"¡Eh! ¿Por qué habría de sentirme extraño?", respondió Venus confundido.

"¿Ser la única mujer en la tripulación?", añadió Deuce.

Todos esperaron la respuesta de Venus, pero en lugar de eso, él estalló en risas.

"¿Estás bien?", preguntó Ace preocupado.

"¿Ustedes creen que yo... soy mujer?", dijo Venus mientras se señalaba a sí mismo con el pulgar.

Todos asintieron con entusiasmo, y Venus continuó riendo.

"Pues lamento decirles que soy un chico", dijo Venus, aún con una sonrisa en su rostro.

"¡¿Eres un hombre?!", exclamaron los tres sorprendidos.

"Sí", confirmó Venus, dejándolos atónitos.

De repente, Ace se desplomó y Venus lo agarró antes de que cayera sobre su comida. Saber y Deuce se asustaron.

"Narcolepsia", explicó Venus, y los demás asintieron, retomando su comida.

"¿Ocurre con frecuencia?", preguntó Deuce.

"Mm... cada pocos días", respondió Venus después de pensarlo un momento. "Si no duerme lo suficiente, ocurre con más frecuencia", agregó. "La primera vez que sucedió, me sorprendió mucho, ya que se cayó del barco", dijo con un suspiro.

Ambos se sorprendieron por la revelación. Y se sorprendieron aún más cuando Ace se levantó repentinamente y continuó comiendo. Venus, Saber y Deuce comenzaron a reír a carcajadas, contagiados por la situación cómica. Ace, sin entender lo que pasaba, se unió a la risa del grupo.

Al terminar su comida, decidieron diseñar el Jolly Roger de su tripulación pirata. Estaban emocionados por celebrar su nuevo emblema, pero su alegría se vio interrumpida cuando un barco de la marina los atacó. Un poco enojados por la interrupción, lucharon con facilidad y derrotaron a los marines, mientras Ace incineraba su barco en señal de victoria.