chapter 39

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Tarde en la noche

Naruto: Emiko, ¡la señorita Takeda me dijo que te invitara a cenar!

*Gritó un Naruto más joven, abrió la puerta para ver a Emiko siendo asesinado, Naruto permaneció allí congelado, su pequeño cerebro incapaz de sentir nada más que shock y miedo, con una mano temblorosa se atrevió a mirar hacia arriba y vio al responsable. Un Shinobi, un shinobi que llevaba una máscara blanca y negra, con ojos rojos, ojos penetrantes de color rojo sangre, Naruto tropezó hacia atrás cuando la cosa, los monstruos se levantaron. Y comenzó a caminar hacia él. Lo que fuera que estaba a punto de suceder no sucedió, ya que la cosa miró por la ventana, debió haber escuchado algo, algo que Naruto no podía escuchar, los latidos de su corazón le impedían escuchar algo más que eso. La figura oscura saltó por la ventana, Naruto se levantó y lo siguió, pero ya se había ido.*

Naruto;h... ayuda!!! ¡¡Alguien ayuda!!

*Naruto gritó esperando que una de las hermanas del orfanato estuviera lo suficientemente cerca para escuchar sus gritos, Naruto se arrodilló ante Emiko colocando su cabeza en su regazo, estaba fría al tacto, con un kunai todavía clavado en su corazón. Emiko giró la cabeza y lo miró sin nada más que odio*

Emiko: fuiste un cobarde, me dejaste morir....

Mundo real

*Naruto se despertó con un pequeño salto, se sentó en su cama y comenzó a hacer algunos ejercicios de respiración, dejando que las lágrimas fluyeran libremente*

Naruto: no hay vergüenza en llorar, no hay debilidad en mostrar emociones. Las emociones significan que te preocupaste, significa que todavía eres humano. Yo... eso...

*Las palabras de Naruto se perdieron en su garganta por el nudo que estaba atrapado dentro de ella, Naruto se tapó los ojos con una mano y comenzó a llorar en silencio. Incluso si ha hecho las paces con la muerte de Emiko, eso no significa que a veces no se despierte triste por ello.*

Naruto: respira... respira....

*Naruto se ordenó a sí mismo, respiró hondo y lo dejó escapar, se levantó de la cama y se sentó en el suelo en posición de meditación*

Naruto: eras un niño pequeño, no podías hacer nada al respecto, no es tu culpa.

*Naruto se dijo suavemente a sí mismo mientras comenzaba a meditar. Para calmar su cerebro y poner sus pensamientos en orden*

cambio de escena

*Sakura salió de su habitación bostezando, iba al baño cuando vio la luz en la cocina*

Sakura: ¿nos olvidamos apagarlo?

*Sakura murmuró para sí misma mientras caminaba, imagínense su sorpresa cuando vio a N usando la estufa*

Sakura: ¿N? Son las 3 de la mañana, ¿qué estás haciendo?

Naruto: ah Sakura, ¿te desperté? Pido disculpas si lo hice. No podía dormir bien así que decidí prepararme un poco de chocolate caliente, ¿te apetece un poco?

*Preguntó Naruto sin mostrarle su rostro, Sakura se encogió de hombros y se sentó, tamborileó sus dedos sobre la mesa mirando a su compañera de cuarto*

Sakura: sabes, ser la mejor amiga de Hinata te enseña algunas cosas.

Naruto: oh?

*Preguntó Naruto mientras buscaba tazas, al encontrarlas, las dejó y comenzó a verter las bebidas calientes en ellas, todavía sin mirar a Sakura*

Sakura:si, una de ellas es saber cuando alguien ha estado llorando.

Naruto:..... No es nada de lo que debas preocuparte, es... Era sólo un viejo recuerdo, de cuando era un cobarde.

El ronin errante N Donde viven las historias. Descúbrelo ahora