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Hope

-Karma is my boyfriend.

-Karma is a god.

-Karma is the breeze in my hair on the weekend.

Keyla tiene cara de querer matarnos mientras Sam y yo bailamos alrededor de ella. No hemos podido resistirnos a sacarla a la pista cuando ha empezado la canción.

-Muy bien, lo pillo -dice de brazos cruzados -basta ya.

-Pues yo no pillo ni la mitad, pero vaya temazo -responde Sam -Karma's a relaxing thought.

Keyla pone los ojos en blanco y intenta irse, pero Sam le hace una barrera con sus muletas y las cambia a color rojo, así que se queda en medio de la pista de brazos cruzados mientras el lisiado y yo bailamos y cantamos. Almenos, hasta que Adriel viene al rescate y la saca de la pista. Antes de irse me mira mal, pero me da bastante igual, acabo de beberme dos cubatas más yo solita.

Bueno, a medias, porque Sam me roba un poco cada vez que puede hacerlo.

-Espera, ¿esas son Lisa y Kath? -dice quedándose completamente paralizado.

-Eeeemmmm, no, te lo estarás imaginando -respondo, dándole otro sobro a mi bebida.

-Hope Brown.

-Vaaaale, no me insistas tanto. Lisa acaba de decirle a Kath que quiere besarla, por cierto.

-¿¡QUÉ!?

Asiento con la cabeza mientras le doy otro sorbo a mi pajita con cara de angelito y Sam abre mucho la boca.

Así que le meto el dedo en la boca y me rio.

Mala idea.

Porque Sam tiene una arcada y por poco me vomita encima.

Pero se incorpora muy dispuesto y se encamina hacia donde Lisa y Kath se encuentran. No alcanzo a escuchar nada, pero puedo ver cómo Sam le dice algo a Kath y está lo ignora completamente para hacer una mueca de sorpresa al ver las luces de sus muletas. Lisa sonrie como una diablilla y se da media vuelta, dejándolos discutiendo.

Dirijo la mirada a Adriel y me lo encuentro con Keyla, que tiene una expresión extraña en el rostro. No acabo de entender si es tristeza o rabia, pero no pierde de vista a Lisa.

Pongo los ojos en blanco, ¿ahora sí que mira a Lisa?

Escucho a la gente quejarse cuando la aparto de mi camino para llegar hacia ella.

-Lo prometiste -le espeto a Keyla, o lo intento, porque mi voz sale con un tono ridículamente infantil y hipo al acabar de hablar.

-¿Eh? -dice ella, bizca porque está mirando el dedo acusador que he puesto frente a su rostro.

-¡Prometiste no hacerle daño y mírala!

Mis palabras pierden toda la seriedad porque dos chicas pasan por detrás de mí y, aunque apenas me rozan, yo me tropiezo y me caigo hacia delante.

-Oye, cuidado -Adriel me agarra en sus brazos antes de que pueda caerme, todo me da vueltas.

Miro a Keyla fijamente, Oliver se saca los cascos para enterarse del chisme, pero antes de que pueda decir una palabra más, es ella la que habla.

-No se la veía muy dolida bailando con esa...

-¡Cierra la boca! -vuelvo a intentar abalanzarme sobre ella, pero de nuevo lo único que consigo es humillarme a mi misma porque hipo y me resbalo con alguna bebida en el suelo -¡eres una pedazo de sinvergüenz...! ¡AAAAAHHHHH!

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⏰ Última actualización: 19 hours ago ⏰

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La esperanza de AdrielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora