Comenzamos nuestra historia en una línea fronteriza, en un mundo muy particular, parecido al nuestro pero a su vez distinto. En este planeta habitan especies de todas las formas y tamaños junto a los humanos. Todos los seres se dividen en cinco grandes grupos o clanes que se reparten por los territorios: los Monstruos, los Polimorfos, los Humanos, los Troles y los Muertos. Los clanes han existido durante milenios en la tierra y, como toda nación, su larga historia está repleta de conflictos de todo tipo.
Pero un día en particular se detonaron ciertos sucesos. En el territorio humano, una zona cerca de una ciudad fortificada, en un antiguo santuario santo abandonado desde hacía mucho tiempo, se denunciaron actividades delictivas sospechosas cerca de dicho lugar. Con la esperanza de ahuyentar a los posibles adolescentes que se encontraran allí, el gobernador de la misma ciudad fortificada envió a un pequeño grupo de soldados que se encontraban patrullando el área después de una misión. El grupo era de siete soldados e incluía a Sam Volteo, subcapitán del décimo quinto escuadrón de caballería y la mano derecha de Oracio Pradet, capitán de caballería del décimo quinto escuadrón de las brigadas humanas de élite, para encargarse del problema.
Los soldados se notaban un poco desanimados por el pesado trabajo, puesto que el grupo volvía de encargarse de otra misión y empezaron a quejarse de lo fastidioso y molesto de su encargo. Los incesantes quejidos hicieron que Sam tratara de animarlos, pero no paraban de quejarse.
"—¿Por qué no envían a alguien más si solo es un grupo de vándalos?"
"—Sí, estamos cansados y solo nos quieren fastidiar."
Pero el capitán Oracio se dio la vuelta y miró a los chicos, silenciando todos los quejidos, y con autoridad les respondió:
"—Eso no importa. Si son solo un montón de ratones o si son los líderes del ejército contrario, debemos responder al llamado porque es nuestro deber como agentes de la paz y el orden en nuestro continente y un pilar de seguridad para nuestra especie. Así que cierren sus culos y vamos a trabajar. Entre más rápido terminemos, más rápido volveremos a casa a descansar."
El capitán descendió del cielo montado en su grifo, aterrizando en el lugar donde supuestamente se estaban realizando actos de vandalismo, y se sorprendió al ver que el lugar parecía muy antiguo, de hace más de quince siglos. Todo estaba en ruinas y hecho polvo, con escombros y rocas por todas partes, con trozos de pilares destrozados por doquier. Buscando entre todos, encontraron un pasadizo que conducía bajo tierra.
Sam dijo:
"—Diablos, no esperaba que el sitio estuviese tan deteriorado. Hace ya varios años que lo cerraron al público porque está lleno de trampas, lo que lo vuelve un potencial riesgo para cualquiera. Es por eso que nos enviaron a sacar a quien sea que trate de entrar."
Oracio le respondió:
"—Sí, muchos creen que este lugar, por ser antiguo y de carácter histórico, guarda algunas reliquias o artefactos valiosos, pero no es así y solo terminan lastimándose o, peor aún, en algunos casos."
Sam caminó en dirección a la pared izquierda de la entrada y comenzó a tocarla toda, buscando algo.
"—Sí, pero ellos no saben que en la entrada hay un interruptor oculto que desactiva todos los mecanismos y deshabilita todas las trampas del pasillo."
Sam procedió a retirar un ladrillo de la pared para revelar un interruptor oculto, el cual desarmó las trampas. El grupo comenzó a caminar por el pasillo y notaron que no había rastros de que alguien estuviera allí, y mucho menos adolescentes torpes y descuidados. Las trampas no se activaron, por más hábil que sea una persona, no podría pasar por todo el pasillo sin siquiera haber accionado una sola. El aire del ambiente se comenzó a tornar pesado, cada vez más a cada segundo. Era esa sensación que tienes cuando sabes que algo malo está a punto de suceder.

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Demon play
Adventureun mundo lleno de acción, aventura, fantasía, ficción plagado de guerras y luchas titánicas donde seguiremos un conjunto de historias de la mano de nuestro protagonista en su aventura en este maravilloso mundo