Las personas que me despreciaban por ser feo ahora me encuentran irresistible

Capitulo 1 - Transmigrado al Cuerpo de un Niño Gordito y Tonto

Xu Xilu observaba sin expresión su reflejo en el espejo de bronce.

Un rostro pálido y cetrino, con los rasgos apretados, un par de granos rojos e hinchados adornaban sus mejillas y un doble mentón tan prominente que no necesitaba inclinar la cabeza para notarlo. Aunque no era extremadamente feo, tampoco se podía decir que tuviera un aspecto normal. Sin embargo, sus ojos eran hermosos, claros y brillantes, no menos impresionantes que los originales de Xu Xilu.

Xu Xilu originalmente era un modelo que se ganaba la vida con su rostro y cuerpo, y debido a su destacada apariencia y talento natural, se convirtió rápidamente en la mascota de la industria de la moda a una edad temprana. Medio mes antes, un accidente lo transportó al cuerpo de Xu Xilu de dieciocho años, convirtiéndose en el despreciado segundo joven maestro de la residencia del secretario. Durante ese medio mes, debido a una infección de resfriado, Xu Xilu estuvo delirante, débil y casi no salió de la cama. Cuando finalmente se recuperó, había adquirido recuerdos que no eran suyos.

La familia Xu era una de las casas más poderosas en la capital. El padre de Xu Xilu, Xu Taihe, era un alto funcionario de primera categoría en el Ministerio de Obras. Xu Taihe, originario de Cangzhou, creció en la pobreza. Su madre vendía fideos en la calle y lo crió sola, esperando que algún día tuviera éxito en sus estudios y trajera honor a la familia. Desafortunadamente, dos años antes del examen imperial de Xu Taihe, su madre murió después de una larga enfermedad, dejándolo solo con unos ahorros escasos que no cubrían ni el viaje a la capital. Justo cuando Xu Taihe estaba sin recursos, apareció la madre de Xu Xilu.

La familia Liu tenía una posada en el este de la ciudad, cerca del puesto de fideos de la madre de Xu. Aunque el negocio no era próspero, la familia Liu vivía sin preocupaciones. La hija de Liu, Liu Shujie, era conocida por su belleza, tan encantadora y pálida como la luna, la belleza más codiciada de la ciudad. Cuando llegó la edad adecuada para casarse, los casamenteros casi rompieron el umbral de la puerta de la familia Liu, pero Liu Shujie no mostró interés en ninguno, incluido el hijo mayor del señor Zhang o el hijo menor del funcionario Wang. Sus padres, que la adoraban, no la presionaron, pensando que simplemente aún no había llegado el momento adecuado. Lo que no sabían era que su hija ya había prometido su corazón y había estado apoyando secretamente a su amante para que tomara los exámenes imperiales en la capital.

La familia Liu, aunque comerciantes, también valoraban su reputación. Cuando se descubrió el romance secreto de Liu Shujie, su padre la castigó severamente y su madre lloraba todos los días. A pesar de la ira de sus padres, Liu Shujie solo tenía una cosa que decir: "Esperaré a que Xu Lang tenga éxito en los exámenes y vendrá a casarse conmigo."

El romance secreto de Liu Shujie se hizo conocido y nadie más vino a pedir su mano en matrimonio. La familia Liu se convirtió en objeto de burla entre las familias respetables de Cangzhou.

Afortunadamente, el destino favorece a los verdaderamente devotos. Tres años después, Liu Shujie finalmente vio a su amado regresar. En ese momento, Xu Taihe ya era un graduado distinguido, vestido con ropas finas y admirado por su apariencia durante su desfile por la ciudad, lo que atrajo la atención de muchas mujeres. La familia Liu estaba encantada de tener un yerno así y, sin preocuparse por las formalidades matrimoniales, le entregaron a su hija directamente. Liu Shujie pensó que finalmente podría tener un matrimonio feliz con su amado, pero no sabía que en la residencia de Xu en la capital, ya había dos mujeres esperándola: la esposa legítima, Zhang Shi, y la concubina noble, Xie Shi.

Así, con todas sus ilusiones matrimoniales, Liu Shujie entró en la residencia de Xu por la puerta lateral. Al principio no podía creer su situación y estaba desconsolada, pero con el tiempo se resignó a su realidad. Aunque era solo una concubina y venía de un entorno humilde, Xu Taihe la trató con el mismo cariño de siempre.