4. LA DESPEDIDA

187 23 23
                                    

TAYLOR

Al día siguiente todos los niños estábamos a nuestro rollo, Nicky y yo estábamos sentados en la hierba del patio mientras hacíamos pulseras, hoy no tenía ganas de jugar al fútbol ni de dejarlo solo ya que sus amigos no habían salido porque estaban castigados, los dos lo estábamos disfrutando ya que no solemos tener estos ratos de solo los dos, no desde que Nick era completamente un bebé, levante la mirada de la pulsera que estaba haciendo y me centre en la que estaba haciendo él y me sorprendí lo bien que lo estaba haciendo comparado con el desastre que estaba haciendo yo, Nick siempre había sido bueno con las manualidades y yo adoraba quedarme embobado mirándole mientras estaba concentrado en lo que hacía, como fruncía de forma tierna cuando algo no quedaba bien, cuando sacaba la lengua cuando estaba concentrado, el movimiento de sus manos centrado en su trabajo, el empeño que ponía en todos sus trabajos, la manera que tenía de emocionarse, saltar, como brillaban sus ojitos cuando terminaba y le quedaba genial los trabajos.

Siempre pensé que lo que sentía por Nicky era admiración aunque solo tuviera 7 años ya que yo nunca tuve esa energía para los trabajos ni me emocionaba así si algo me salía bien en cambio con los deportes siempre acababa sonriendo y emocionándome si marcaba un gol o conseguíamos ganar gracias a mí... Pero es que Nick es hermoso en todos los aspectos, es como un ángel caído del cielo hacía mi vida para volverme loco, sus ojos, su sonrisa, su pelo suave, como me abrazaba por las noches cuando tenía una pesadilla y como me animaba en los partidos cada vez que podía, todo de él me volvía loco, desde los 6 me di cuenta de que era diferente a los demás ya que nunca me había fijado en una chica como lo hacían mis amigos, osea si me juntaba con chicas pero no tenía esa necesidad de protegerlas y querer estar toda la vida con ellas como me pasaba con Nick, al principio creía que solo era cariño ya que llevamos siendo amigos toda la vida pero con el pasar los meses me di cuenta de que Nick me gustaba, lo amaba pero no me he atrevido a decírselo ya que solo somos unos niños y tampoco se lo que él siente por mi, ¿y si a él le gusta una niña? ¿Y si piensa que soy raro si se lo digo? ¿Y si me deja de hablar cuando se lo diga? No quería que eso sucediera así que decidí guardar mis sentimientos cuando estaba con él para no estropear nuestra amistad

Estaba completamente metido en mis pensamientos que no me di cuenta de que el director se acerco hasta donde estábamos sentados, sentí pequeños golpecitos en el brazo, negué saliendo de mi ensoñación cuando vi a Nick muy cerca de mi cara, me separé de golpe asustando de lo rápido que me había separado

- ¿Qué pasa? - dije levantándome

- Chicos tengo buenas noticias - dice el director mirándonos a los dos con una sonrisa

- ¿Qué noticia? - dice Nick después de mirarnos los dos a los ojos extrañados

- Os han adoptado

- ENSERIO - decimos los dos a la vez sonriendo - NOS ADOPTARON JUNTOS? - otra vez volvimos a hablar a la vez

- El director se queda un rato callado sin saber que decir, en ese momento supe que iba a decir algo malo ya que nunca se quedaba tan callado a no ser que la noticia fuera mala - no - susurra - lo siento mucho chicos pero os han adoptado dos familias diferentes

- No, no, no, esto es una broma no? - dice Nick que empezaba a tener los ojos cristalizados

- Ojala fuera una broma Nick

- No no no no, no pienso ir - le mire sorprendido cuando dice eso sabiendo que su más grande deseo era tener una familia amorosa - no quiero separarme de Tay

- Se que no quieres pero este siempre ha sido tu sueño no puedes desperdiciarlo

- Seguiremos en contacto pequeño - levantó la cabeza para mirarme y sonreí con los ojos llenos de lágrimas

CASUALIDAD O DESTINO// TayNickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora