🫀no es lo que creia🫀

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•Narrador•

El soberano del infierno evito al demonio radio después de ese "casual" encuentro que tuvieron en su oficina, el no podía creer lo que había hecho bajo el sentido del alcohol se sentía avergonzado de que por poco se metía con un pecador.

Un sentimiento de incomodidad llegaba cuando él demonio radio estaba cerca ya que en su mente pasaban pequeños recuerdos del suceso, cuando se lo topaba solo lo ignoraba y seguía su camino, solo cuando estaba su hija Charlie presente le dirigía unas pocas palabras tales como: hola,que tal?,gusto en verte, etc, aún así permaneció cortante.
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La gran fiesta que organizaba la princesa Charlie se estaba acercando así que se tenía que apurar con los preparativos para esta.

Empezaron con los preparativos para el evento, todos se encargaban de algo, Angel del entrenamiento, Husk de los tragos, Vaggie de la seguridad, Niffty de la limpieza y Charlie, Alastor y Lucifer del resto como decoración, las degustaciones etc.

Escogieron una decoración elegante y no tan llamativa con cortinas color vino que adornaban los ventanales, mesas con manteles finos color blanco, flores blancas y rojas que decoraban el centro de cada mesa, una mesa de degustaciones de mantel rojo y detalles dorados y un enorme espacio en el centro para que puedan platicar o bailar entre si.
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El día de la fiesta del hotel llegó y la princesa Charlie invito a mucha gente en especial a los pecadores a quienes recibía con tanto entusiasmo.

El soberano observaba desde el segundo piso recargado en el barandal como su hija les daba una cálida bienvenida a sus invitados,
no pudo evitar formar una sonrisa en su rostro a ver tan contenta a Charlie.

La fiesta empezó, todos los demonios y pecadores hablaban y bailaban al ritmo de la música entre sí, todos festejaban con mucha alegría todos y cada uno tenía alguien con quien bailar o conversar.

El soberano se quedó observando la felicidad que emitían todos y cada uno de sus habitantes ya que el era el único solo en aquel lugar, tomó una copa de champagne para seguir observando.

De la nada el soberano sintió que alguien le tocaba el hombro, se dio la vuelta para encontrarse con su hija Charlie. -Hola papá! que haces aquí tan solo? ve a divertirte!- exclamó la princesa con un tonodemonio.

-Gracias por la invitación cielo, pero no se... no me siento tan animado como para hablar con alguien- le contestó el soberano desanimado.

-Esta bien papá- la princesa se despidió con una sonrisa y lo dejó solo.
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El soberano se empezaba a aburrir además de que el no sabía socializar, después de siete años en soledad era obvio el porqué, se decidió en recorrer los pasillos del hotel para distraerse, para su suerte no había gente en los pasillos del segundo piso ya que todos estaban muy entretenidos abajo.

Decidió ir al balcón para toma aire fresco, la vista era hermosa la Luna en forma de estrella alumbraba cada rincón del pentagrama, el soberano se quedó contemplando el paisaje tranquilamente.

-No lo se me habían sucedido tantas cosas desde que llegue aquí, que ahora sin nadie quien interrumpa me siento tan tranquilo- El soberano suspiro aliviado dibujando una sonrisa en su rostro.

En el fondo se escuchó el sonido de unos zapatos acercándose a el, el soberano no lo noto estaba tan distraído en centrar su vista en la Luna, la extraña silueta se puso a lado del soberano y le preguntó con educación -Siento interrumpirlo majestad- El soberano volteo a ver lo sorprendido al no notar su presencia, el recuerdo del suceso volvió a el, no podía mirar al demonio radio.

El soberano volvió a mirar hacia la Luna -¿Que haces aquí?- le preguntó al demonio radio seriamente.

-la princesa Charlie me pidió que lo buscara ya que había desaparecido repentinamente...- tomó una pausa acercándose más al soberano estando a lado suyo -¿por qué no está disfrutando de la fiesta majestad?- a el le interesaba saber su respuesta.

El soberano pensó una excusa para decir, que pensaría ese pecador al saber que el rey del infierno no sabía socializar -Es que... ninguna de esas canciones son de mi preferencia- el soberano esperaba que eso responda la pregunta de aquel demonio a lado suyo.

-Eso se puede arreglar fácilmente- con un chasquido de sus dedos Alastor apareció una radio que flotaba entre ellos dos y enseguida se escuchó una música proveniente de ella -¿Qué le parece majestad?, solo dígame ¿qué quisiera escuchar?-

El soberano noto la insistencia que tenía aquel demonio para que el ¿pudiera estar cómodo?. Un suspiro salió de sus labios está vez teniendo un tono algo arto. -Nada en realidad..- Mencionó dirigiendo su mirada a sus manos enfocándose en su anillo.

El demonio se mantuvo cerca de él sin comprender la situación que el rey estaba pasando. -Acaso ya no lo alegra verme?- Su mirada se concentró en su rostro el cual se veía desanimado.

Al escucharlo, el soberano sintió un escalofrío recorrer su cuerpo. -Nunca me he alegrado al verte.- Su tono de voz se notaba serio y frío mientras evitaba mirar a aquel demonio.

ˏ⸉ˋ‿̩͙‿̩̩̽‿̩͙‿̩̥̩‿̩̩̽‿̩͙‿̩͙‿̩̩̽‿̩͙‿̩͙‿̩̩̽‿̩͙‿̩̥̩‿̩̩̽‿̩͙'⸊ˎ

𝙿𝚊𝚕𝚊𝚋𝚛𝚊𝚜:𝟾𝟽𝟷

esta corto pero espero les haya gustado.

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⏰ Última actualización: Jun 28 ⏰

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¿El pecado es verdadero?  (Lucifer x Alastor) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora