001:Nueva Integrante.

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La guardería "Rincón de la Alegría", no era una gran guardería, pero tenía una buena reputación, los cachorros eran bien cuidados en ese lugar, la mayoría de trabajadores eran omegas, por que llevarse con los pequeños eran sus especialidades.

Allí era donde trabajaba Yuki desde hacía un par de años. Cuando se gradúo en la universidad esa fue su decisión y no se quejaba de eso, hasta tenía un título en cuidado de cachorros y maestro.

Le gustaba mucho pasar tiempo con los pequeños de cuatro años, enseñándoles como leer y escribir. Era una de las cosas que más le gustaba, estar rodeado de pequeños cachorros, suaves y muy tiernos.

Tenía la esperanza de encontrar algún día a un alfa y formar una familia, pero claro, fuese más fácil si el no fuera un asocial. En parte, pues era alguien muy tímido y reservado, en sus veinticinco años, nunca había ido en fin de semana a fiestas.

Prefería estar en casa leyendo un libro o dormir, ni siquiera se quedó en la fiesta de graduación de la universidad en la que estudió, solo fue con su madre por el título y después se fueron a su casa a celebrar comiendo comida italiana.

Se logró independizar después de eso, consiguió un pequeño apartamento a un buen precio y trabajó en la guardería, cuidaba a los pequeños casi como si fueran propios.

Todos sus compañeros eran amables con el, quizás era casi el más joven, pero no había problemas con eso, lo único que si lo tenía un poco triste era que, es el único omega sin pareja, ni marca.

Quizás teniendo en cuenta que era el más joven no habría tanto problema, pero, Checo era mayor que el solo por un año y tenia una marca que lucir en el cuello.

Lo hacia sentirse muy solo, y lo peor del caso, es que era un virgen. No podía no pensar en la palabra "nudo" para llenarse de vergüenza.

Vergüenza debería darle a el mismo ¡Era un adulto por todos los santos!

Pero, no tenía toda la culpa, cuando era pequeño no tuvo experiencias muy agradables con desconocidos.

En la primaria y secundaria sufrió de abusos escolares por parte de sus compañeros, eso hizo que se volviera aún más inseguro de lo que era antes.

Por esa misma razón siempre quería estar solo, pues si estaba solo, nadie lo miraría mal ni trataría de hacerle bromas pesadas.

Así fue como paso su juventud, escondido en la biblioteca y en el cuarto de su casa. Pero, aunque siempre quería estar ahí, la vida adulta lo sacó a rastras.

Trabajar, si no trabajaba no tendría dinero, y sin dinero, solo sería una carga para su madre, y ella ya había dado la mayor parte de su vida cuidándolo.

Entonces, al estar en la universidad pensó mucho lo que iba a hacer, y se fue pensó mucho lo que iba a hacer, y se fue por lo más seguro para el, cuidar de los pequeños.

Se gradúo como especialista en eso, incluso tomó algunos cursos pediatría. Y trabajar es una guardería era lo mejor, tanto como para el para los del lugar, pues si algún cachorro se enfermaba, el sabría que hacer.

Un día en particular cuando llego a su trabajo en la hora habitual, fue recibido por un gran lloriqueo, se preocupó por eso y fue hasta el origen de éste.

-¿Qué ocurre?- Preguntó cuando llegó, habían por lo menos tres omegas tratando de calmar a una pequeña de cabellos marrones, nunca antes la había visto antes, por lo que supuso era una nueva integrante en la familia.

-¡Ya no se qué más hacer, lleva llorando desde que su padre la dejó, y eso fue hace casi una hora!- el pobre Charles mecía a la pequeña en sus brazos, pero ésta seguía llorando y pataleaba para quitarse el agarre de el mayor.

Sus mejillas pequeñas estaban rojas y llenas de lágrimas. Entendía que quizás era la primera vez que ella se separaba de sus padres y por eso estaba así, había lidiado con un par de cachorros antes.

-Ya pequeña, ya. Tus papis vendrán después por ti, deja de llorar.- Charles estaba frustrado, al igual que los demás, parecía que el asiático también se ponía a llorar en cualquier momento.

-¿Ya le dieron de comer, su pañal le incomoda? - Apareció Max de repente poniendo un dedo sobre su mentón, y los demás asintieron.

-Tratamos de darle su biberón, pero no lo quiso y su pañal ésta bien, ni siquiera ésta húmedo.- Explico otro Omega mirando a la pequeña, a Yuki se le partía el corazón verla de esa forma.

Se le miraba tan triste, tal vez la pequeña no estaba acostumbrada a los extraños, y eso solo hacia las cosas peor.

-Ven préstamela, creo que tú angustia solo la altera aun más- Yuki había acabado de llegar, así que estaba tranquilo, en cambio los demás tenían un aire de preocupación.

Max asintió y le dio a la pequeña, quien se puso a llorar con más fuerza al ver que la estaban pasando de una persona a otra. Yuki trató de sostenerla con cuidado y la acostó sobre su hombro, cerca de su glándula del aroma.

Le empezó a dar palmaditas en la espalda tarareando una canción de cuna. Para su milagro, los lloriqueos fueron bajando de intensidad en cuestión de minutos y se volvieron sollozos.

Yuki sintió como la pequeña se aferraba a su ropa y acercó su carita a su cuello, aspirando de manera tartamudeante por sus anteriores lloriqueos. Los demás se quedaron viendo entre asombrados y aliviados, al menos ya no habría más ruidos estridentes.

-Bien hecho Yukino, pudiste calmarla!- Charles fue el primero que habló y el pelinegro se sonrojó con algo de vergüenza, no estaba acostumbrado a recibir halagos.

-N-no fue nada, solo quise ayudar.- Respondió y los demás solo sonrieron más tranquilos, cada uno fue a hacer sus cosas con los demás pequeños que iban llegando, Yuki se fue a un salón.

El era el encargado de seis cachorros, tenia que estar al pendiente de ellos y al parecer tenía que cuidar de otras más. Se llevo consigo la mochila de la pequeña que dormía sobre su hombro, revisarla con una sola más no fue fácil pero tampoco imposible.

Luciano Gasly, un año de edad, alergia a las moras. Se sorprendió un poco por eso, no habían muchos cachorros de un año de edad en esa guardería, normalmente llegaban más de dos años en adelante.

Los omegas eran muy protectores con sus pequeños en su primer año de vida y apenas podían despegarse un poco de ellos cuando tenían el año y medio.

Pero el no era nadie para juzgar, quizás sus padres eran muy ocupados y no podían cuidarlo como les gustaría.

-Bien pequeño Luciano, ¿Hay qué llevarnos bien, te parece?- Habló en un susurro mientras acariciaba con suavidad la espalda del pequeño, Luciano solo dio un suspiro, al parecer dormiría más.

(...)

Holaa

Si, ya se que Pierre es frances y Luciano es un nombre en español, pero vamos a hacer q la madre de Luciano va a hacer Kika (novia de pierre) y ella es portuguesa.

Chausitoo

¿Mamá? [Yukierre] Yuki Tsunoda x Pierre GaslyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora