Solución

122 9 1
                                    

En la sala del hospital, Markus intentaba ayudar a Liam a cambiarse de ropa para poder irse a casa ya que Loid tenía algo importante que hacer, no obstante, la plática no había ocurrido y el joven rubio entendió por qué y no quiso presionar a su hermano menor, no obstante, este fue quien inicio la plática.

Creo que papá quería vender la casa porque era demasiado grande y nosotros dejamos de ir tan seguido—sonrió triste—eso ha de haber sido un gran dolor en su corazón

Si—suspiro—igual si Alina no estuviera y Emma se fuera obvio vendería mi casa

Hermano, intento entenderte a ti también—lo miro—pero, ¿tú quieres vender el centro comunitario solo para molestar a los Desmond y a Blackbell?

Si lo pones de esa manera—sonrió con tristeza—creo que esa fue mi estúpida forma de actuar

¿Qué harás entonces? —lo miro—muy ajeno a todo, ese lugar igual fue algo importante para ti, digo conociste a Alina ahí cuando ibas con mamá

Creo que aún no lo he pensado bien—lo miro—hermano, discúlpame por dejarte solo en esto de la muerte de mamá y sé que tampoco debí decirte esas cosas horribles, soy un pésimo hermano mayor y un pésimo hermano menor cuando Anya igual intento cuidarme, aunque yo golpee a su esposo, es más soy horrible porque ese cuñado nunca hablo mal de mí con ella

Yo te disculpo—le sonrió—sino lo hago seguro lloras, pero ¿crees que ambos te perdonen?

Intentare, al final Anya siempre estuvo cuidando de mi desde que era un bebé y hasta ahora de adulto, creo que ella es una excelente hermana mayor y—cerro los ojos—se casó con un buen hombre que es capaz de cargar con mis idioteces con tal de no hacer que ella se moleste conmigo o que papá me odiara

A veces hablas de Damián como si fuera Dios—se burló—ya dile a Alina que te divorciaras de ella y te quieres meter en el matrimonio de tu hermana

¡IDIOTA! —se sonrojo—amo a Alina y amo a mi familia

No obstante, el sonido de la puerta se hizo presente y Anya quien lloraba se acercó a sus dos hermanos para abrazarlos

Los amos a los dos—intento contener el llanto

Hermana—los dos hermanos abrazaron a la mayor y lloraron, esa pequeña platica se había vuelto de nuevo un pegamento para los Forger

Damián solo sonrió con ternura, al fin los tres hermanos estaban tranquilos y sin ocultar sus identidades, al fin podían hablar de sus sentimientos sin culpa.

Idiota—Markus hablo—digo Damián, te pido una disculpa también a ti por todo lo ocasionado—se reverencio

No te preocupe—cerro los ojos y se giró—mientras mi amada esposa te disculpe yo no tengo porque estar enojado contigo

Anya se acercó a su esposo y lo abrazo con ternura

Pero no llores amor—beso su mejilla—ya sé que era lo que querías oír

¡ANYA! —se sonrojo

Oigan, pudieran llevar a Liam a casa—Markus miro su celular—tengo que ir a un lugar antes de que se haga noche

Está bien—todos se quedaron confundidos

Lejos de ahí Markus llego a un hotel donde ese maldito empresario lo estaba esperando junto a otros inversionistas

Mi querido Markus, ven vamos a comer—le señalo la puerta al restaurante

Todos se sentaron en la mesa y los meseros llegaron a tomarles la orden, luego los dejaron solos

Primera navidad sin tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora