Bestfriend; brocedes. AU

04

Después de unos minutos de haber estado leyendo lo que estaba en el avioncito decidí guardar el número del doctor en mi móvil y después le envié un mensaje aceptando su invitación, ya que era de mala educación rechazar invitaciones de tus mayores.

Pasaron varias horas y ya mi tiempo de servicio de hoy se había terminado, así que me arreglé un poco para cuando saliera a cenar con Sebastian.

Minutos después justo a las nueve de la noche llegó a la habitación Sebastian no sin antes haber tocado la puerta. Lo invité a pasar y al instante noté como su rostro se veía sorprendido.

—Que bien te ves Lewis -me halaga. No se porque pero me sonrojé un poco, no porque no recibiera halagos seguido, sino que simplemente me sorprendía tener un halago de esa forma de un compañero de alto rango.

—Gracias -respondí con una sonrisa.

—¿Nos vamos ya? -me pregunta el.

—Claro -respondo y después el se hace a un lado para que yo pueda pasar antes.

Yo caminaba más adelante que el hasta que después estuvimos caminando en la misma distancia y el colocó su mano en mi espalda, ese era un afecto no tan común en personas que no eran parejas. Así que se podría decir que todos y todas los que trabajaban en el hospital y nos conocían nos estaban observando asombrados. El se detuvo un momento en la recepción del hospital y yo estaba nervioso, no sabía porque pero lo estaba. Me encontré a mi amigo Charles.

Me sonrió de manera pícara y me dijo "suerte" en un susurro.

Le golpeé el hombro en manera de juego.

Sebastian se puso a mi lado y me pasó el brazo por los hombros de forma posesiva frente a Charles. El solo alzó sus manos en expresión de lo siento y después se fue. Reí mentalmente por su posesividad.

Llegamos a un restaurante muy lujoso a mi parecer y estuvimos cenando calladamente hasta que me suelta algo que no esperaba.

—Me gustas -suelta Sebastian.

—¿Como dice? -pregunté asombrado.

—Me gustas desde que empezaste tu internado en mi hospital el año pasado -me confiesa.

Realmente no sabía que hacer en ese momento ya que no quería hacerlo sentir mal rechazándolo ya que era mi senpai, no sabía que pasaría si lo rechazaba pero sería sincero.

—Si me rechazas no pasará nada, no quiero que estes conmigo solo porque soy residente -admite el.

—No me gustaría rechazarte porque se ve que eres una persona muy dulce y linda. Solo que estoy enamorado de alguien ya desde hace unos años -le confesé.

—Si me lo esperaba -sonríe el tomándose muy bien la respuesta.

—¿Ah si? ¿Por qué? -pregunto yo interesado por su respuesta.

—Eres de las únicas personas de las que trabajan en el hospital que no se emociona por mi presencia o que no está loco por mi, eso fue lo que me llamó la atención de ti. Además de tu muy hermosa y distinguida manera de sonreír -me admite el tomando de su copa de vino.

—Oh ya veo, muchas gracias -sonreí amablemente.

—¿Quien es la persona afortunada la cual te gusta? -pregunta el acomodándose mejor en su lugar.

—Es alguien muy cercano a mi, solo que somos mejores amigos y creo que yo no le intereso a el -le conté.

—Entonces, ¿por qué no lo olvidas y lo intentamos tú y yo? -pregunta con ilusión.