𝕷𝖔𝖛𝖊 𝖇𝖆𝖘𝖊𝖉 𝖔𝖓 𝖑𝖎𝖊𝖘

03.- 𝕮𝖍𝖆𝖕𝖔𝖙𝖊𝖆𝖓𝖉𝖔 𝖋𝖚𝖊𝖗𝖆 𝖉𝖊𝖑 𝖆𝖌𝖚𝖆

𝕸𝖆𝖘𝖙𝖊𝖗 𝖔𝖋 𝖑𝖎𝖊𝖘

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6 de abril - Lugar: Campos deportivos de la escuela

"¡Kiyotaka, será divertido!"

"No entiendo como sucumbí a esto"  murmuré para mí mismo mientras caminábamos hacia el borde del campo, donde el entrenador, un sujeto obeso que tenia una etiqueta que gritaba diabetes, nos esperaba con una expresión que podría helar el infierno.

El entrenador nos miró con sus ojos de acero y su ceño fruncido. "¿Y ustedes dos son...?"

"Sí, soy Yousuke Hirata, señor", respondió Hirata con una determinación que rozaba lo absurdo. "Y soy  delantero. ¡Voy a ser el Ronaldo de este equipo, sensei!"

"Ronaldo, ¿eh?", gruñó el entrenador, arqueando una ceja con escepticismo. "Lo dudo, pero está bien. Y tú, ¿Cómo te llamas y en que qué posición juegas?"

"soy Kiyotaka Ayanokouji, y... no tengo preferencia"

Hice fruncir el ceño a gordo-sensei, quien empezó a rayar cosas en su libreta antes de volver a hablarme.

"Ayanokouji, ¿eh? ¡Suena como un nombre de genio!", musitó el entrenador, acercándose con un deje de interés. ¡Bien, jugarás como el mediocampista entonces!". ¡Necesitamos a alguien con cerebro en esa posición!"

El entrenador señaló hacia el centro del campo, donde los jugadores se movían estratégicamente y distribuían el juego. "El mediocampista es el cerebro del equipo, el que coordina los ataques y defensas. Y tú, Ayanokouji, tal vez, pareces tener la inteligencia necesaria para esa posición".

No parece seguro, pero la falta de gente en esa posición parece grande, solo puedo suponer esto como su excusa para completar el equipo.

Negué con la cabeza. Me encontré aquí debido a falsas promesas que nunca esperé de alguien como Hirata. Parece estar obsesionado con que lo acompañe, y al final lo logró.

De todos modos, puedo escaparme en cualquier momento.

Detrás de nosotros, un grupo de sus fans entusiastas gritaba y vitoreaba 

"¡Vamos, Hirata-kun! ¡Eres nuestro héroe!", clamaban, como si estuvieran presenciando el nacimiento de una leyenda.

Después de la designación del entrenador, Hirata y yo nos miramos brevemente. Las llamas de sus ojos alcanzo su punto máximo. Aunque había sido arrastrado a esto por Hirata, no podía evitar sentir una pizca de curiosidad por lo que estaba por venir.

Sin darle tiempo al entrenador para retractarse de su decisión, Hirata agarró mi brazo y comenzó a arrastrarme alrededor del campo en una especie de celebración improvisada. "¡Lo logramos, Ayanokouji! ¡Vamos a ser la mejor dupla del equipo!"

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El sol del mediodía derramaba su luz sobre el campo de fútbol, creando un escenario vibrante y lleno de energía para el entrenamiento. Hirata y yo, recién incorporados al equipo, nos encontrábamos en el borde del campo, enfrentando lo que parecía ser una interacción bastante peculiar. 

Mientras trotamos juntos, podía observar al resto del equipo observándonos, algo extraño. Ninguno se encontraba corriendo u trotando, todos estaban con un ojo puesto en nosotros. 

Voltee a ver al sensei, pero el entrenador se había quedado dormido en su asiento con una revista tapando su rostro mientras se quedaba frente al campo.