🦇The Blood Mansion || Nuzi🦇

EP 11 || Lejos de estar cerca

La noche había pasado, y fui despertada por los rayos del sol caer sobre mi rostro, me sente sobre la cama con el pelo desordenado y me frote los ojos para quitarme lo adormilada.

Voltee hacia los lados pero al voltear a mi derecha me encontré frente a frente con la cara de... ¿N?, quien pareciese que me había estado observando dormir. Parpadee un par de veces y volvi a frotarme los ojos sin entender nada, él estaba viéndome fijamente...

Al instante de darme cuenta de su cara frente a la mia me exalte y con la sabana me cubrí. –¿Qu-qué?, ¿P-por qué? —Me cubria el cuerpo con las sabanas mientras tenía su mirada fija en mí.

–¡Buenos días! —Dijo el peliblanco sonriendo gentilmente, me costó un par de segundos caer en cuenta de lo sucedido anoche por la impresión, aunque al tener esos recuerdos vívidos en mente me ruborize. –¿Estás bien?, ¿tienes las mejillas rojas?, ¿no te habras enfermado o si? —Comentó ligeramente preocupado.

Al darme cuenta de el desastre sonrojado que era mi rostro tape mi cara con las sábanas. –¡Estoy bien, cállate! —Mencione avergonzada. N tomó mis manos y me hizo descubrirme la cara con una sonrisa gentil, lo miré con indiferencia unos segundos y luego quite sus manos de las mías y le heche la sábana sobre él para cubrir su vista.

Me levanté de la cama, y mientras N estaba confundido por haberle puesto las sábanas encima me coloque rápidamente mi ropa y mi gorra. –¿La tipa malhumorada ya se fue o no?

El peliblanco finalmente se descubrió el rostro y respondió. –Salió temprano. —Suspire de alivio, me coloque mi sudadera.

–Si ese es el caso... ya tengo que irme. —Al momento de intentar dar un paso adelante noté que mis piernas estaban temblorosas, ignorando ese hecho me acerqué a la puerta pero mis piernas se cruzaron lo que casi provoca que casi me cayera.

Al instante de casi a punto de caer al suelo, caí en los brazos del vampiro peliblanco, quien se había levantado rápidamente para evitar que me cayese, levante la mirada del suelo y se la dirigi a él. –..., ¡cambiate primero!

Exprese enojada, después de varios minutos de sermones míos, N se había cambiado por completo. Y sin que se lo pidiera, me tomó entre brazos y abrió la puerta de la habitación, a lo cual sin tantas opciones no me negué y solo me cruze de brazos, llevandome entre el pasillo hasta bajar las escaleras hasta el primer piso de la mansión.

Al momento de llegar abajo lo mire. –¿Puedes bajarme ya?

–¿Estás segura, Uzi? —Preguntó algo indeciso, rodé los ojos y después aceptó, bajandome de sus brazos y dejándome en el suelo.

Una vez mis pies tocaron el suelo una pequeña risita se oyó por detrás mio, y de repente alguien me tomo de los hombros, levante la mirada y me di cuenta que era la peliblanca V. La vampira recargo su rostro en mi hombro mientras me sonreía. –¿Ya te vas tan pronto?

–¿Si...? —Le devolvi la mirada con un tono de ligera incomodidad aunque a cierto punto comenzaba a acostumbrarme a su manera de actuar tan pegajosa.

–V déjala en paz —.Reclamó N a V de manera defensiva, V rodó los ojos ignorando a los reclamos de su hermano.

–Es una pena linda, esperaba que te quedaras a desayunar... o que te desayunaramos a ti~ —Mencionó la peliblanca con ese ligero tono coqueto que siempre tenía.

–No desayuno humanos- —Le contesté de mala gana cruzandome de brazos.

–Uh-, ¿no comes humanos pero si vampiros?, que interesante~ —Se río entre dientes la vampira albina antes de ser sorprendida por su hermano quien la empujó lejos de mi para ser el quien me tomase de los hombros.