Ben
una chica, ojos color miel, pecas poco visibles, cabello dorado como el ocaso, sonrisa de brackets morados, demasiado inocente como para ser verdad, rulos que caían por sus sonrojadas mejillas, piel pálida como la nieve, pestañas rizadas que bailaban con cada pestañeo, clavícula marcada, no medía más de un metro y medio, manos pequeñas, caderas anchas, cintura pequeña.(y un culito...).
la mirabas y solo irradiaba inocencia, amabilidad y una extraña calma, cada vez que fumaba cada vez que me iba a dormir solo podía pensar en cómo sería tenerla en ms brazos, besarla, tocarla. Seguro la destruiría, como hago con todo lo que toco, quería sacarla de su mundo y traerla al mío, lleno de oscuridad, quería tomar su mano y adentrarla a mi mundo lleno de caos.
quería llamarla por su nombre todas las veces que fueran necesarias : Mae, Maeva. Anhelaba tenerla, y sé que ella también me anhela a mí, estoy siendo demasiado suyo como para preocuparme por alguien más. en mi mundo de humo y hierba, dolor y oscuridad ; solo existía Maeva.
esto de estar lejos de ella me mata por dentro, tenía un deseo incontrolable por salir detrás de ella y hacerla mía, que se olvidara de todos; de su familia, sus amigas, quería que fuera solo mía y de nadie más ¿porque necesitaría a alguien más?, conmigo tendría todo lo que está prohibido para ella, y sé que la idea no le desagrada.
¿sería muy egoísta?, no soy superman, todo el mundo lo sabe, vivo rodeado de hierba la mayoría del tiempo, gasto mi dinero en drogas, vivo con cara de matar a quién sea que se atraviese en mi camino, y claro que he pensado en matar a cualquiera que se acerca a Maeva, ella ya firmó su sentencia de muerte y lo sabe, ambos lo sabemos, solo está retrasando algo que está a punto de pasar, pero me gusta esto, me gusta que mi presa corra mientras pueda, me gusta el hecho de que cree que puede escapar de mí, me agrada el hecho de que cree tener todo bajo control, cuando no es así.
Maeva sería mía, solamente estoy dejando que se divierta un poco con sus ilusos pensamientos, Mae, no era tan inocente como se piensa, yo lo sé, la he visto divertirse con el humo de mi cigarrillo, he visto los libros que tiene en su estante, sé de que tratan, sé que me desea.
Sé que desea con ganas ser mía, y yo estaba dispuesto a ver el mundo arder con tal de que fuera de mi puta propiedad.
es cómo estar en la selva, Maeva es el pequeño ciervo que mira a todos lados por si viene algún cazador, y yo la pantera que la asecha desde los arbustos, castañeando con los dientes y anhelando el sabor de mi presa.
Maeva puede intentar correr todo lo que quiera, pero en cuanto la toque será mía, en cuanto sea mía le mostraré lo prohibido, en cuanto sea mía podrá descubrir lo que le gusta, en cuanto fuera mía, todo rastro de luz se iría.
Traerla a mi mundo no sería difícil, ella ya siente curiosidad por ciertas cosas
solo necesitaba un empujón.
"estoy demasiado consumido por mi propio deseo incontrolable, consumido por la idea de destruir algo inocente y puro, traerlo hacía mí y romperlo, hacerla llorar y consolarla, tenerla a mi merced, para mí y solo para mí, si no obtengo lo que quiero me volveré loco"
"estoy enamorada de ti Ben, entiendelo, se supone que eres mi novio!"
"lo siento"
"¿que?"
"no sé que decirte"
"no importa, que sepas que hoy cumplimos 7 meses"
"lo olvidé"
"sí lo sé, estabas demasiado drogado como para darte cuenta"
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Destruyeme
Random-lo hizo él?.-inquiere yo me acomodo en la silla, cruzándome de brazos y achicando la mirada. -él no me hace nada.- quise sonar más segura pero no lo hice, tal vez él no me haga nada físico ni nada que se pueda ver, pero a simple vista yo no estaba...