- Sí, baby... sí -murmuró Minho suavemente, con las manos en las caderas de Hyunjin mientras las movía contra él. Estaba sentado en el borde de la cama con él en su regazo, ambos desnudos el uno para el otro.
Montar a Minho era imposible de explicar para Hyunjin. La sensación era efímera, como nada que hubiera sentido jamás con ninguno de sus ex, ni siquiera se le acercaban. Pero verlo tan vulnerable y fuera de control era muy excitante.
- Mierda, más rápido, cariño... - Y cuando él rogaba así, daban ganas de jugar con él, de hacerle rogar hasta que estuviera al borde de las lágrimas. ¿Cruel? Tal vez, pero todo vale la pena cuando llega el orgasmo.
- ¿Sí? ¿Quieres que vaya más rápido? -Minho asintió con entusiasmo ante su pregunta, sus ojos de ciervo mirándolo desesperadamente, pero frunció el ceño cuando sintió que él disminuía la velocidad.
- Trabajé para conseguirlo - Hyunjin gimió derrotado, su respiración era inestable mientras su placer disminuía la velocidad, dolorosamente bajo.
- P-por favor baby... - gimió él, oh... Qué celestial sonaba. Hyunjin sonrió con picardía, obligándolo a mirarlo agarrándose la mandíbula.
- Dime cuánto quieres que acelere, pobre bebe. -Él gimió de nuevo. Un sonido tan hermoso.
- Por favor, qu-quiero... mm, quiero que rebotes sobre él... - Tal pedido lo hizo excitarse aún más, pero no podía vacilar, la diversión aún no había terminado.
- Mm... ¿qué tal si jugamos un pequeño juego, hm? -Minho sabía exactamente lo que iba a pasar a continuación por experiencia propia, y ahora mismo estaba desesperado por cualquier tipo de liberación que sabía que no obtendría durante al menos 10 minutos después de que esas palabras fueran dichas.
- Cariño...
- Él primero que se mueve pierde, de verdad inténtalo por mí, Min~ -Nunca podía decirle que no, incluso cuando sabía que los siguientes minutos iban a ser una tortura celestial.
El cielo y el infierno al mismo tiempo.
Hyunjin dejó de moverse por completo ahora, dejando que la calidez de Minho realmente se hundiera. Nada podría compararse con la sensación de Minho dentro de él. ¿Y la mirada en sus ojos en ese momento? No había nada más caliente.
Minho lo miró con sus ojos de ciervo, enamorado de todo lo que él era, una neblina de borracho de amor lo rodeaba. - ¿Por qué me torturas así, amor? -Preguntó suavemente, con diversión en su tono.
- ¿Tortura? Tortura sería atarte para que no pudieras tocarme... o vendarte los ojos para que no pudieras, puedo hacer eso si tú...
- ¡No..! No... hmm... - Hyunjin rió de su impotencia, ahuecando su rostro con sus manos y plantando un beso en sus labios perfectos
- Es tan excitante cuando ruegas y te quejas por mí, por eso~
- Pervertido... - bromeó, provocando que Hyunjin lo golpeara juguetonamente - Cuidado, podrías moverte y perder -Hyunjin nunca perdía.
- Te encantaría, te haría um... -gruñó profundamente, pensamientos sucios recorriendo su mente de nuevo mientras sentía sus labios contra su cuello.
- Mierda, vas a ser mi muerte, por favor, solo fóllame bebe - su tono quejoso iba a ser la muerte de Hyunjin en su lugar
- Sabes qué hacer, pero perderás.
Minho odiaba perder.
- Por favor, mierda - sus manos se abrieron paso hasta su pecho, ahuecando ambos pezones para distraerse de la falta de placer que había debajo, y por supuesto funcionó, Hyunjin le dio un calor magnífico.
- Todo lo que tienes que hacer es embestirme Min, sé que quieres.
- Lo quiero... más que nada, pero sabes que odio perder -se rió.
- Entonces no pierdas, pero no lo haré, así que podríamos quedarnos aquí atrapados para siempre.
- Ugh, a la mierda.
Minho no pudo soportarlo más, embistiendo dentro de Hyunjin y admitiendo la derrota antes de morir literalmente.
- Oh, mierda... -jadeó ante el movimiento repentino, un mal seguimiento justo después.
- Mierda, baby... perdiste -dijo
- ¿Lo hice? Si esto termina conmigo eyaculando dentro de tu pene, entonces no estoy de acuerdo -quiso decir por su elección de palabras, sintiéndose de repente como un desesperado ahora.
- Oh, Dios... -tomó la iniciativa de nuevo, haciendo exactamente lo que él le rogó hace unos minutos, rebotando arriba y abajo en su largo.
- Hmm te ves hermoso, tan jodidamente hermoso -lo hizo sentir tan segura de su cuerpo. Minho mantuvo sus ojos fijos en su rostro, observando con los labios entreabiertos cómo coincidían perfectamente con el ritmo de los movimientos.
Podría volverse loco con solo mirarlos. - Sí... sí, sigue.
- Hazlo, Min, por favor. -No había nada más que decir.
- ¡M-mierda... Sí...! -chilló, rematando hasta el borde antes de que cayera en la cueva del placer.
- Oh, Jinnie, eso fue...
'Jodidamente perfecto.'
THE END
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𝐒𝐊𝐙 - 𝑶𝒏𝒆 𝑺𝒉𝒐𝒕𝒔.
Fanficone shots de stray kids, donde en algunos eres la protagonista. heterosexual/homosexual +18