El AGENTE

Nueva Identidad

Recorriendo la ciudad me di cuenta de un abundante movimiento en el barrio japonés, sabía que hicieron invitaciones a todas las mafias y bandas de la ciudad para carreras y peleas ilegales, faltaba horas para el evento.

Se que no puedo ir al descubierto, por eso seguí mi camino hacia la tienda de ropa más cercana para así comprar un disfraz y pasar desapercibido o intentar que nadie sepa que soy yo, porque las mafias no me deben de querer mucho y para la CIA no estoy en la ciudad.
En la tienda compre una traje tradicional y bandana negra, era bastante cómodo la verdad y la máscara cubría todo mi rostro, ya con el puesto conduje hacia el evento. Más personas habían llegado, casi que no había sitio para estacionar, el resinto era bastante grande y estaba bien iluminado, habían mucho autos deportivos, la maroyia eran de color negro con detalles de algún color, además de los Dj's, lo que llamaba la atención era el ring de boxeo y la jaula de artes marciales mixtas.

Subí a un lugar el cual era una especie de balcón y veías todo, en los vips estaban los principales jefes de mafias y las personas que organizaban el evento, al mirar a la parte baja donde estaba la acción, había un pequeño detalle, que nadie llevaba armas solo los guardias que estaban en el vip.

La velada comenzó, dos chicos subieron a los rings y empezaron a golpearse, mi atención se centró en la pelea de boxeo, había uno de los peleadores qué tenía un tatuaje bastante peculiar qué decía "bullet" no era la primera vez que lo veía, una vez finalizada la pelea.
Observe cada paso de él, se sentó en una de las barras de alcohol y por lo que contenía el vaso, estaba tomando whisky.
Luego de un rato largo el se digno a salir del recinto y yo lentamente comencé a ir tras el a una distancia razonable, el estuvo fumando afuera con cinco personas más, que casualmente tenían una bandana de color rojo. Caminé hacia mi auto y quedé ahí dentro observando y esperando hacia el.
El subió a un auto el cual no pude ver su matrícula, cuando él se puso en marcha yo también aceleré y mantuve una distancia media en todo momento, el detuvo el auto en un club nocturno. Decidí no entrar y para no aburrirme, tome foto al lugar y a todas las matrículas de los vehículos que estaban ahí, también decidí cambiarme de ropa en el auto, no pretendía seguir a una persona vestido con este traje y la máscara.
El salio con una vestimenta diferente, ahora el vestía completamente de negro y una bandana roja que tapaba su boca y nariz, además llevaba una pistola. Se subió a otro vehículo y salió de ahí a toda velocidad, yo continúe siguiéndole.

Es ese club nocturno debe de haber muchas cosas y no van a tardar mucho en investigarlo, luego dar una vueltas por la ciudad el entro a un callejón, yo detuve el auto en el lado derecho de la calle y me quede esperando ver qué ocurría, no podía meterme ahí sabiendo que está armado.

Agarre mi celular para sacar una foto al callejón y a toda la zona. De pronto, dos disparos retumbaron en toda la calle, rápidamente agarre mi pistola de la guantera y cuando abrí la puerta de mi auto. Otro auto salió del callejón y me dispararon cuatro veces, antes de seguir su camino, examine todo mi cuerpo, por suerte no tenía herida de bala, cuando comencé a caminar hacia el callejón vi que las ruedas delanteras de mi auto estaban pinchadas, sin darle importancia corrí hacia el callejón, dentro del mismo había una persona retorciéndose de dolor en el suelo, di unos pasos más hacia él y cuando me acerqué al cuerpo.
Sentí como un puño se marcaba en mi rostro haciéndome caer al suelo, haciendo que mi pistola se escapara de mis manos. Cuando intenté pararme otro puñetazo en la mandíbula hizo que volviera a caer al suelo boca abajo, vi que mi pistola estaba bastante lejos de mi alcance, definitivamente no iba a llegar  de pronto sentí el contacto de un arma en la parte trasera de mi cabeza.

—¿Quién eres? ¿Por qué me sigues?
—Dejame pararme y te lo explicaré. El chico tenía acento ruso, como lo suponía.
—Ni en sueño, contesta mi pregunta. Hizo más presión en mi nuca con el arma.
—Un desconocido. Escuché cómo él empezó a reírse.
—Bien desconocido, ¿porque me sigues?
—No te seguí.
—Desde el club de los japoneses me venís siguiendo. Cayó en mi trampa.
—Me gustó como pelaste, lo hiciste muy bien. El volvió a reírse y hacer más presión con la pistola.
—Conmigo eso no, dime la verdad.
—Es que necesito tu ayuda, quiero entrar a tu mafia. El volvió a reírse más fuerte, pero las sirenas de policía se empezaron a escuchar a lo lejos.
Él rápidamente ató mis manos y me subió a su auto, comenzó a conducir y en cuestión de segundos abandonamos la zona. Mi auto había quedado enfrente de aquel callejón, se que la policía e incluso la CIA de la ciudad lo va a investigar, pero hay más posibilidades de que me den por desaparecido o muerto, a que habrán una investigación en mi contra.
El chico freno el auto en un descampado a las afuera de la ciudad, abrió mi puerta y me jalo del brazo haciéndome caer en el suelo y di dos vueltas en la carretera de tierra.
—Deja de seguirme o te asesinaré. Subió a su auto y se fue del lugar a toda velocidad, dejándome con las manos atadas y sin formas de llegar a la ciudad.
Luego de luchar un rato largo, logré desatar la cuerda de mis manos. Saqué el móvil qué tenía pegado con cinta en mi muslo y llamé a Erika, mientras camino hacia la ciudad que está bastante lejos.