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Ni siquiera se me cruzaba por la mente volver a esa casa, con esas personas, y no me refiero a volver con Zuria y Felipe, con todas las personas que conocía en esa ciudad, me iba de Argentina y me iba para Connecticut unos meses, varios meses.
Estando allá hice varias amigas, Eleanor y Taylor, como Taylor Swift, ahre.
Habían pasado ya 7 meses desde que me fui de Argentina, nunca hablé con ninguno de mis anteriores amigos, ni con Zuri, Felipe, Blas, Pilar, con absolutamente nadie, excepto mi madre, con quien hablaba todos los días sin falta.
Hacía unos días mi madre me había comentado de volver a argentina, y la verdad es que lo tenía muy en cuenta, extrañaba a mis amigos, aunque probablemente no me atrevería ni siquiera a pasar por la casa de estos, pero también extrañaba a mi madre y me hacía falta estar con ella, así que en estos días compre el boleto para argentina y me volvía en unas semanas más, de verdad que me hacía una emoción volver allá.
Por mientras, me despedí de mis amigas como se debía, ya que probablemente no las vuelvo a ver en un largo tiempo, pero sé que no es un adiós para siempre.
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Por fin habían pasado esas largas semanas para volver a argentina, aunque estaba BASTANTE nerviosa por lo que fuera a ocurrir, me emocionaba volver a Argentina, volver a ver a toda esa gente que no vi por mucho tiempo, etc.
Ya tenía todo listo, visa, pasaporte, boletos, valijas, absolutamente todo, solo estaba esperando la hora del vuelo para poder largarme ya. Y así fue, en cuanto se llegó la hora del vuelo corrí hacia el check-in para hacer todo y por fin regresar.
El vuelo fue bastante normal, realmente no hice nada interesante, comer, dormir, ver el iPad, sacar fotos, ir al baño... Cosas de avión.
Cuando llegué a Argentina mi mamá y mi hermano me recibieron con los brazos bien abiertos, era lo que más necesitaba, un abrazo de ellos.
— Che, como te vas a ir así sin despedirte si quiera. — habló mi hermano y reí. — Te extrañé gorda. — dijo sin abrazándome y sonreí por el abrazo.
Abracé a mi mamá y nos fuimos a la casa, extrañaba tanto ese lugar, ya ni siquiera recordaba su olor.
— Zuria llamó mil veces. — Dijo mi mamá mientras manejaba, evité el tema.
— Sí, tus demás amigos también, ¿Cómo se llamaba el pibe este?... Mhmm... Ah! Ya! Blas, ese mismo. — Yo solo abrí los ojos sorprendida y hablé
— ¿Blas?, ¿Qué dijo?.
— Nada che, lo normal, que qué había pasado y por qué no aparecías por ningún lado, en tu cumpleaños ni te pudo felicitar.
— Y bueno, no quería ni mirarlo ese día.
— Dale, que pudo haber hecho él, si hablabas re bien cuando te gustaba. — Dijo mamá
— Las apariencias engañan. — Reí y todos hicieron lo mismo.
Después de charlar bastante en el auto, llegamos a casa, a mi queridísima casa.
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HOLAAAAAA
chicos pido una enorme disculpa por no actualizar en meses, volví a la escuela pero ahora en vacaciones ya me gradué y recordé que tenía esta historia, además que en vacaciones se me da demasiado por leer entonces instalé de nuevo wattpad, pero ya estoy de vuelta, por lo menos hasta regresar a la escuela.
