Sergio nunca había estado interesado en el deporte automotor. Hasta que una mañana en México, conoce a un chico rubio de ojos azules que hace que su mundo se ponga de cabeza.
🥇🎖️#Wag 20/04/24
🥈 #chestappen 07/04/24
🥈 #sergioperez 07/04/24
🥉 #ma...
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La recién formada pareja seguía dormida en los brazos del otro, Max tenía la cabeza en el pecho de Sergio, ambos brazos estaban abrazando el torso y tenía la pierna encima de la cadera de su ahora novio.
Checo tenía un brazo rodeándolo y tenía la cabeza encima de la de Max. Ambos estaban muy cómodos sintiendo el calor de sus cuerpos.
Max se removió entre sueños al oler un delicioso olor a vainilla, abrió lentamente los ojos para acostumbrarse a la luz que se colaba por las ventanas de la habitación.
Con ambos brazos acarició el pecho de alguien, así como abrió los ojos a su mente llegaron todos los acontecimientos de la noche anterior, levantó la cabeza viendo a Sergio dormir plácidamente.
El rubio puso ambas manos en sus labios conteniendo el grito de felicidad genuina que amenazaba con salir por haber dormido con ese pecoso del que se enamoró a primera vista hace un mes.
Se acercó al rostro del castaño para ver más de cerca esas pecas que desde el primer día quería ver así de cerca.
Puso la mano derecha en la mejilla y la mano izquierda acarició suavemente las pecas.
— No sé que hice bien para tener a este hombre como mi novio — susurra dándole un suave beso en los labios.
Notó como se removía y luego abrió los ojos de a poco,sonrió al tener a Max como primera imagen el despertar.
Checo tomó el rostro entre sus manos y se acercó a darle un casto beso en los labios — Buenos días, novio.
— Buen día, novio — se ocultó en el cuello de Sergio para no ver la reacción que tendría.
— No debe de avergonzarte — en un inesperado acto se acostó en la cama, tomó a Checo de las caderas y lo subió a su regazo dejando ambas manos en la espalda de su novio.
— ¿Y esto a que se debe? — río viéndolo a los ojos.
— Dijiste que no debía avergonzarme — olió el cabello rebelde de Checo.
— Yo lo decía porque es muy lindo escucharte decirme novio — suspiro acostándose más cómodo sobre Max.
— Oh, no importa, aún así es muy cómodo tenerte encima mío — río bajito dando caricias en la espalda de Sergio.
Se quedaron unos minutos más en esa cómoda posición hasta que el estómago de de Sergio le indicó que necesita alimento.
— Tengo hambre...
— Vamos a la cocina, puede que tenga algo que sirva — se sentó en la cama aún con su novio encima.
— ¿Hace cuanto no vienes a esta casa? — pregunta levantándose con pesar ya que se sentía muy cómodo en el regazo de Max.
