DuXiNo----

¡¿cuándo acabará?!

La atracción se prendió, unos chispazos de electricidad se dispararon, el carril de la montaña rusa comenzaba a avanzar y finalmente la puerta se abrió. Los chicos corrían en fila, locochon los encabezaba y avanzaban corriendo, tenían que ser rápidos, de lo contrario una horda los alcanzaría.

Disparaban de ambos lados ya que los infectados estaban dispersados, todo estaba bajo control... Estaban tensos pues cualquier paso en falso les costaría muy caro. Subían y bajaban, disparaban y  recargaban, locochon se detuvo de golpe a la par de que un túnel se encontraba en frente.

- ¿Que sucede? ¡Avanza!
-¿Loco?
- ¿Alex?

No entendían porque se congelo tan de repente, los demás se acercaron, vieron hacia el túnel, era oscuro y estrecho, de él salían los quejidos y gruñidos de los zombis, era tétrico, el olor de todos ellos era asqueroso y pútrido. No era tiempo de quedarse quieto tenían que moverse pues los perseguían desde atrás; inmediatamente duxo sacó su linterna, alumbró y tal como creían, al paso de la luz se incorporaban los infectados, los chicos disparaban pero no era suficiente, ellos no paraban de llegar, no era tiempo de detenerse, el primero en adentrarse fue Aquino quien empujó al primer infectado que se le cruzó, disparo y motivo a los demás a seguirlo, Kendo se quedó sin municiones no podía hacer nada para defenderse, soltó el arma que tenía en manos y dispuso a adelantarse para no morir, un hunter se le abalanzó en sima, los demás estaban ocupados para defenderlo, Kendo solo grita mientras forsejea con el, el rubio toma un pedazo de madera de los carriles, la situación era crucial, Kendo estaba sudando, lo daba todo por no ser infectado o destripado vivo, tomo la astilla y se la incrusto al infectado, la sangre comenzo a desbordar en sima del chico, sacó la astilla y volvió a enterrarla  para ese momento, la madera ya había atravesado un ojo, al volverla a retirar se llevó el ojo junto con la astilla, Kendo interpuso su rodilla con el dorso del zombie, el infectado estaba perdiendo cada vez más fuerza junto con la sangre que desbordaba en el cuello y cara del rubio quien por última vez incrustó el pedazo de viga en la cabeza, atravesando el cerebro,  esta vez el infectado se fue hacia un lado cayendo al suelo muerto.

Kendo se puso de pie, estaba temblando por la adrenalina del momento, sus manos y torso estaba manchados en sangre, soaring lo noto y se dispuso a protegerlo, duxo era sometido por los infectados al grado de ser completamente rodeado, los chicos lo cubrían como podían. Natalan noto una bomba casera en medio del túnel, corrió hacia ella y  la activó, la lanzo por fuera del túnel, los infectados corrieron detrás de ella mientras que los chicos avanzaban del lado contrario así saliendo del túnel con el sonido de alerta de la bomba casera presionandolos por apurarse.

Corrieron todo lo que pudieron y no por qué la explosión fuera grande sino que aprovechaban la distracción y la oportunidad del momento, finalmente llegaron al centro de la atracción Para desactivar la alarma quien lo hizo fue Aquino, quien se veia débil, usó todas sus fuerzas para bajar la palanca.

- adántense..!

Su respiración era pesada, después de bajar la palanca se recostó en una de las vigas, estaba exhausto , cerro los ojos un segundo, cuando volvió a abrirlos un charger corría hacia él, chocó contra el mostrador, aquino del susto cayó hacia un costado, se levantó y corrió hacia él refugio que estaba cruzando un puente, el infectado no lo perseguía pero el chico seguía corriendo, se tropezó con un botiquín y solo así se percató de que estaba a salvo, tomo el botiquín, volvió a pararse y camino con los demás, cerró la puerta y puso el seguro, con ayuda de duxo, locochón bloqueo esa puerta.

Los muchachos estaba cansados, corrieron tanto que les palpitaba las plantas de los pies, soaring, natalan y loco  se recostaron a descansar en el suelo, kendo estaba limpiándose la cara.

Aquino camino un poco hacia duxo para luego caer en su hombro, el pelinegro lo abrazo sosteniendo su cuerpo, estaba preocupado.

- ¡¿Aquino?!